ecuatoriano escribió:si sales con la muletilla del pobre Guayaquil indefenso por los gobiernos centralistas de Quito pues hay que ahondar en el tema, no quedarnos en la tradición de la élites guayaquileñas e historiadores porteños, hay que ser críticos y reflexivos!!!, es nuestra obligación analizar la historia con objetividad, o de lo contrario no toquemos el tema.
Me parece perfecto tu llamado a la crítica y la reflexividad, y sobre todo a analizar la historia con objetividad. Me parece terrible como en el Ecuador se hace política con la historia. Creo que es reflejo de la pobreza intelectual en que vivimos.
si los esmeraldeños fueron los giles que murieron machete en mano pues ni modo, ya se ve que la ciudad de Guayaquil no estaba para resistir inútilmente al invasor cual Masada,
No sé si fueron giles. Pero sí sé que lo que se hizo con ese personal fue el testimonio más grande a la mediocridad (¡la palabrita de moda!) en que se desenvolvía el "alto mando" militar del Ecuador de entonces. Creo que fue hasta criminal.
Sobre Guayaquil y Masada: habría que ver si Cuenca o Loja tenían intenciones de convertirse en Masadas criollas en 1941. En todo caso, no hubo ninguna Masada en la provincia de El Oro. Lo cual está bien.
ecuatoriano escribió:pero tenemos que ser intelectualmente honestos, no podemos caer entonces en la muletilla de que Quito no envió armas, que estábamos desprotegidos, etc.; eso es hacerle el juego a los divisionistas de ahora, para resistir una invasión primero hay que tener voluntad de resistir
Bueno, seámoslo. Practiquemos todos la honestidad intelectual, digo yo.
Si vamos a comentar que ciertos personajes de renombre en el Guayaquil de entonces proponían -entre otras cosas- que esto se declare ciudad abierta, como en efecto se pidió, expongamos pues las razones que motivaban ese pedido. Veamos el contexto, el gran cuadro general de la situación.
Para que tu reproche a Guayaquil por no haber estado dispuesta a convertirse en una Masada frente a los peruanos sea un verdadero ejercicio de honestidad intelectual, tu haría bien en completar el análisis, y no dejarlo a medio camino. Entre otras cosas, me parece que tendrías que considerar las decisiones que había tomado con anticipación el Ejército ecuatoriano con respecto a Guayaquil en caso de que los peruanos se aparezcan un buen día a las puertas de la ciudad.
Porque lo cierto es que en agosto de 1941, perdido El Oro y perdida la guerra en 72 horas, el Ejército ecuatoriano estaban esencialmente intacto. Sus grandes unidades, prestas a defender la Patria. Montando guardia en todos los pasos que conducían de Guayaquil a Guaranda y de Pasaje a Cuenca.
¿Porqué? Porque la decisión, como seguramente sabes, era crear una especie de "Festung Ecuador" entre los dos ramales de la cordillera de los Andes, contra la cual se estrelle todo intento peruano de avanzar sobre Quito, de ser el caso.
Y en esa Festung no alcanzaba espacio para que entren Guayas, Manabí o Los Ríos. Esto, para no hablar de la provincia de El Oro y lo que pasó allí. A defenderla con batallones de castigo, y a reforzarla con carabineros, jovenes milicianos de fin de semana, desempleados, vagabundos soldados retirados, y por supuestos, negros esmeraldeños y sus machetes. Si la cosa es hablar de la historia del 41, pues hay que decirlo todo. Si criticamos a los carabineros que se emborracharon y se sublevaron en Puerto Bolívar, pues critiquemos también a los comandantes y la tripulación del aviso Atahualpa, que se largaron de Puerto Bolívar sin avisar a nadie y desobedeciendo expresas ordenes del Mando Superior. Osea, que se diga todo, con ollas y sartenes incluídos.
Si el Ejército ecuatoriano no tenía ninguna intención de inmolarse en las calles de Guayaquil, con ollas o con sartenes o con lo que sea, para resistir victoriosamente cual Stalingrado, ¿qué te hace pensar que los parroquianos deseaban ver a Guayaquil quemada y destruida? ¿Qué? Así nomás? Por las puras arverjas?
De allí la importancia de aquello que tú reclamas, la honestidad intelectual. Que no es sino considerar todos los elementos de juicio posibles antes de emitir un criterio o un juicio histórico, sobre todo cuando se cuenta con el beneficio de la retrospectiva, que da una gran ventaja en esto de interpretar la historia y señalar culpables. No se trata de traer aquí a los bonaerenses con sus ollas y sartenes.
no podemos caer entonces en la muletilla de que Quito no envió armas, que estábamos desprotegidos
Yo no he dicho eso de que "Quito" no envió armas. Esto no es de Quito contra Guayaquil Ya te expliqué a qué me estaba refiriendo.
Peor sería, en todo caso, que te venga aquí con la muletilla de que el Ejército no salió a enfrentar al invasor del 41 "porque el presidente Arroyo no dejó".
