en los combates sobre Ildib, se está viendo que hay costumbres que el ejército sirio no pierde, como la de regalarle a los insurgentes blindados en buenas condiciones, el último este.

Lo que vemos es un BRM 1K, la versión de reconocimiento del BMP-1 de toda la vida, modelo que antes del conflicto, Siria no poseía.
Y todavía hay quién se pregunta el motivo por el cual los rusos solo les están entregando chatarra en lugar de vehículos nuevos.