

Pero él tendrá su motivación para tener dicha posición, y seguramente habrán ciudadanos colombianos que tienen esa misma idea o la de algunos abogados que se les ocurrió la magnífica idea de poner al gobierno colombiano, mediante una demanda ante el Consejo de Estado, a reclamarle a España la devolución de la parte del Tesoro Quimbaya que está allá. Vamos, que entre 50 millones de mechudos que somos acá, tiene que haber alguien así en la viña del Señor..
Son los que yo llamo "buscapleitos profesionales y gratuitos". Parece que a esos no le enseñaron en la casa que cuando uno regala algo es porque lo hace voluntariamente y con deseo expreso de agradecer algo o demostrar cariño por alguien. Por consiguiente, lo que se regala NUNCA se pide de regreso.
Ahí es cuando se justifica el regreso de la Urbanidad de Carreño al pensúm académico, a ver si aprenden algo de buenas maneras. Curiosamente es una cosa de abogados hecha por allá en la privacidad de los juzgados y de las Cortes, porque en Colombia, el ciudadano de a pie, el común y silvestre, no anda en plan de marchas o protestas exigiendo el regreso del Tesoro Quimbaya y menos pidiendo que re-floten el San José. Es más, a la gente una vez le preguntaron que qué se debía hacer con lo hallado en el Galeón. La mayoría de acuerdo que era patrimomino de la nación, pero que de venderlo nada, todo para un museo.
Así que no esperen que el colombiano de a pie vaya y prenda antorchas y se mande en montonera a quemar la Embajada de España por un pecio a chorrocientos de kilómetros y a otros tantos cientos de metros bajo el agua. Que eso no da para tanto.
Si no quemamos a los daneses cuando a unos locos allá les dio por vender camisetas con logos de las Farc y luego mandarles las ganancias de eso... Y eso que sí que toca el alma profundamente del colombiano de a pie...