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Guerras y conflictos modernos desde 1945, como las guerras de Corea y Vietnam, hasta las de Afganistán o la Agresión de Rusia a Ucrania. La Guerra Fría.
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flanker33
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Mensaje por flanker33 »

Yo lo metería ahí, aunque sea de forma breve, para tener todos los enfoques.
Pues de momento, aunque sea entre usted y yo, ya vamos avanzando en el siguiente capítulo. A mí me parece bien. Digamos que se trataría de una reunión de la cúpula político-militar norvietnamita en Hanoi, por ejemplo un día después de la invasión, cuando ya tendrían algo más de información sobre el alcance de la operación aliada, y con los personajes que comentaba en el otro mensaje. Trataría de las reacciones de las diversas partes en el conflicto y la forma de respuesta comunista ante el ataque.
Cierto... eso podría justificar empezar con el "mini-Tet" y luego un "in crescendo" de operaciones de hostigamiento contra las fuerzas desplegadas en Laos hasta que se inicie la ofensiva a gran escala.
Me parece correcto. Las acciones inmediatas con lo que se tiene más a mano (guerrillas por todo el país, hostigamiento en el I cuerpo y en Laos con el NVA) y acumular fuerzas y suministros para una gran ofensiva contra la invasión que pudiera representar un punto de inflexión en el conflicto en caso de victoria.
Bueno... pero el grueso del trabajo lo llevara a cabo el señor flanker33, y tampoco vamos a saturarlo con personajes extra y obligándolo a terminar la historia en el NORAD
:green: esperemos no llegar a tanto...
Idea que se me ocurre... si en medio de la batalla terrestre los americanos decidieran finalmente lanzar una campaña aérea a gran escala contra el Norte, ¿podrían llegar a enviar regimientos de caza de refuerzo los chinos? Al estilo de los soviéticos en Corea, sin declararlo... ¿y los propios soviéticos? A Egipto los enviaron (tanto pilotos como fuerzas de defensa aérea).

Hay quien dice que lo hicieron también en Vietnam, de hecho, pero entra en el terreno de las fantasías conspiranoicas, a falta de mejores pruebas que esto: https://answers.yahoo.com/question/inde ... 805AADUhE2
Mmmm…es interesante para darle más “chicha” al relato. Cazas chinos o soviéticos pero con colores norvietnamitas, y con pilotos y técnicos “voluntarios” de esos países…me gusta la idea, y aunque difícil, tampoco lo veo descabellado llegado el momento en que los comunistas lo estuvieran pasando muy mal.

Voy a hacer "lobbying"

Imagínese a esos senadores republicanos ante las cámaras... ¡o al propio Nixon!

- El Presidente no está haciendo todo lo que está en su mano para apoyar a nuestros muchachos cuando están luchando por la libertad en un país lejano... ¡¿cómo no emplear todo el poder de los Estados Unidos de América para apoyar a nuestras tropas una vez nos hemos lanzado a la batalla decisiva de la guerra?!
:alegre: …si es cierto, pero también que eso mismo lo podrían haber dicho muchas veces durante la guerra. Si decidimos que se haga esa campaña aérea, sería añadir más carne al asador y quizás algunos personajes más para la vertiente aérea (pilotos US y “voluntarios” chino/soviéticos por ejemplo).
Si le apetece hacer una mención... podría ser a través de una carta de un hermano/a de uno de los soldados, que le narra la situación política y social en los EEUU, por ejemplo.
Buena idea.


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sergiopl
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Mensaje por sergiopl »

Digamos que se trataría de una reunión de la cúpula político-militar norvietnamita en Hanoi, por ejemplo un día después de la invasión, cuando ya tendrían algo más de información sobre el alcance de la operación aliada, y con los personajes que comentaba en el otro mensaje. Trataría de las reacciones de las diversas partes en el conflicto y la forma de respuesta comunista ante el ataque.
:thumbs:
Mmmm…es interesante para darle más “chicha” al relato. Cazas chinos o soviéticos pero con colores norvietnamitas, y con pilotos y técnicos “voluntarios” de esos países…me gusta la idea, y aunque difícil, tampoco lo veo descabellado llegado el momento en que los comunistas lo estuvieran pasando muy mal.
Podría ir ligado al incremento de los bombardeos contra el Norte.
…si es cierto, pero también que eso mismo lo podrían haber dicho muchas veces durante la guerra.
Y decirlo lo dijeron (durante ROLLING THUNDER), pero es cierto que LBJ no hizo caso. Luego Nixon si lanzó LINEBACKER-I cuando el NVA lanzó su ofensiva en la primavera del 72 y LINEBACKER-II para "forzar" a los norvietnamitas a ser mas "constructivos" en la mesa de negociaciones. La duda es... ¿una vez que cruza la línea de invadir Laos... estaría Johnson mas dispuesto a dar pasos adicionales que aseguren el éxito de esa campaña?
Si decidimos que se haga esa campaña aérea, sería añadir más carne al asador y quizás algunos personajes más para la vertiente aérea (pilotos US y “voluntarios” chino/soviéticos por ejemplo).
Si se escapa un poco del ámbito que se quiere cubrir en el relato... siempre puede mencionarse en los informes a los "jerifaltes" de uno y otro bando, como parte del "background" del relato.

Sobre la guerra aérea... ¿sería posible que si los soviéticos y/o los chinos se hacen cargo de la defensa aérea de la zona de H-H los norvietnamitas pudieran tener una presencia aérea sobre Laos? Complicado, pero habría que darle un par de vueltas...


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flanker33
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Mensaje por flanker33 »

Podría ir ligado al incremento de los bombardeos contra el Norte.
Exacto.

Y decirlo lo dijeron (durante ROLLING THUNDER), pero es cierto que LBJ no hizo caso
Si, a eso me refería que no ha quedado muy claro como lo escribí.

¿una vez que cruza la línea de invadir Laos... estaría Johnson mas dispuesto a dar pasos adicionales que aseguren el éxito de esa campaña?
Yo creo que en principio no, ya que la decisión de invadir Laos seguro que le costaría mucho y tendría serias dudas, demás de duras críticas en sectores de su gobierno, partido y de la sociedad, por lo que ir más allá sería complicado. Ahora bien, llegado el momento dependería de como evolucionara la situación. Si marchaba bien, no creo que se autorizara, si se estancara y tuvieran muchas bajas...es donde más podríamos dudar que autorizara los bombardeos ampliados, y si la cosa fuera mal como para sufrir una seria derrota, es donde sería más posible una “Linebacker” anticipa.
Si se escapa un poco del ámbito que se quiere cubrir en el relato... siempre puede mencionarse en los informes a los "jerifaltes" de uno y otro bando, como parte del "background" del relato.
La verdad es que siempre me gusta narrar pasajes de combates aéreos. En esta ocasión sería algo difícil si nos centramos en la zona de conflicto...tendríamos que narrar los escenarios aéreos sobre H-H.
Sobre la guerra aérea... ¿sería posible que si los soviéticos y/o los chinos se hacen cargo de la defensa aérea de la zona de H-H los norvietnamitas pudieran tener una presencia aérea sobre Laos? Complicado, pero habría que darle un par de vueltas...
¿De toda la defensa aérea? ...mmm...creo que se necesitaría de un contingente muy fuerte...lo suyo sería reforzar con digamos ¿uno regimiento chino y otro soviético? La presencia norvietnamita sobre Laos es complicada. Los MiG,s operaban desde bases al norte de VdN y tenían poca autonomía como para llegar a la zona de operaciones de Laos y combatir allí, y en 1967 todavía no tenían bases capaces de operar reactores en el centro y sur del país. Si se podría, con trabajos a toda velocidad de ingenieros, acondicionar la base aérea de Phu Qui, cerca de la DMZ, y convertirla de una de transporte a otra capaz de operar reactores, y/o crear alguna base o aeródromo de emergencia capaz de operar MiG,s en alguna zona cerca de Laos o al menos en el centro del país. Podría llevar bastante tiempo, pero con la ayuda de sus camaradas chinos o soviéticos y como la invasión iba a durar varios mese, quizás sería posible algo así. Aunque lo más probable es que trataran de erizar de defensas aéreas la AOR del XXIV CE.


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Mensaje por sergiopl »

Yo creo que en principio no, ya que la decisión de invadir Laos seguro que le costaría mucho y tendría serias dudas, demás de duras críticas en sectores de su gobierno, partido y de la sociedad, por lo que ir más allá sería complicado. Ahora bien, llegado el momento dependería de como evolucionara la situación. Si marchaba bien, no creo que se autorizara, si se estancara y tuvieran muchas bajas...es donde más podríamos dudar que autorizara los bombardeos ampliados, y si la cosa fuera mal como para sufrir una seria derrota, es donde sería más posible una “Linebacker” anticipa.
Esa es la idea que me rondaba. Cuando comenzara la ofensiva norvietnamita en Laos... LBJ aprobaría el plan de contingencia con el que llevarían semanas presionándole los "halcones" de su Administración y los líderes militares, el LINEBACKER-I anticipado, con el minado del puerto de Haiphong y... ¿ataques de los B-52 contra Hanoi como en Diciembre del 72 o eso ya sería demasiado? Éso podría tener su peso a la hora de buscar un remate para la historia.
La verdad es que siempre me gusta narrar pasajes de combates aéreos. En esta ocasión sería algo difícil si nos centramos en la zona de conflicto...tendríamos que narrar los escenarios aéreos sobre H-H.
Exacto... de ahí mi otra propuesta de llevar la acción aérea al sur, peeero...
¿De toda la defensa aérea? ...mmm...creo que se necesitaría de un contingente muy fuerte...lo suyo sería reforzar con digamos ¿uno regimiento chino y otro soviético? La presencia norvietnamita sobre Laos es complicada. Los MiG,s operaban desde bases al norte de VdN y tenían poca autonomía como para llegar a la zona de operaciones de Laos y combatir allí, y en 1967 todavía no tenían bases capaces de operar reactores en el centro y sur del país. Si se podría, con trabajos a toda velocidad de ingenieros, acondicionar la base aérea de Phu Qui, cerca de la DMZ, y convertirla de una de transporte a otra capaz de operar reactores, y/o crear alguna base o aeródromo de emergencia capaz de operar MiG,s en alguna zona cerca de Laos o al menos en el centro del país. Podría llevar bastante tiempo, pero con la ayuda de sus camaradas chinos o soviéticos y como la invasión iba a durar varios mese, quizás sería posible algo así. Aunque lo más probable es que trataran de erizar de defensas aéreas la AOR del XXIV CE.
Por el número de aviones creo que no habría demasiados problemas. 2 regimientos serían, si no me equivoco, 72 aviones... y la NVAF no tenía muchos mas que esos aviones en esa época de la guerra, de los cuales además muy pocos eran MiG-21, de acuerdo con esta fuente: The Air Force in the Vietnam War (p. 22)

Pero el problema, como bien dice, sería la autonomía de los aviones y la disponibilidad de bases aéreas... que además, seguramente serían un objetivo muy goloso para la USAF y la USN. Seguramente optarían por desplegar un buen número de baterías antiaéreas en la zona.


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Mensaje por flanker33 »

Gracias por el pdf, excelente documento.

Con lo ya hablado, y ante la falta de más opiniones, me pongo manos a la obra para el siguiente capítulo.

Saludos.


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Mensaje por KL Albrecht Achilles »

sergiopl escribió: Yo sería partidario del mini-Tet anticipado como fórmula para aliviar la presión sobre el sur de Laos, pues una gran batalla de desgaste con numerosos efectivos del NVA sería lo que estarían deseando los americanos. Vale que esa alternativa no eliminaría la amenaza contra la Ruta... pero los norvietnamitas perderían muchos hombres y material de aceptar combatir contra un enemigo mas poderoso de forma abierta y en el lugar de elección de éste, lo cual a la larga podría llegar a ser peor que la asfixia logística de los combatientes que se encuentran en el Sur.

Otra cosa es, por supuesto, la extensión de ese mini-Tet... que podría quedarse incluso en ese "aumento de la presión en todo Vietnam del Sur y actuar con una estrategia de desgaste contra el XXIV CE". Dificilmente podría llegar a ser una sombra del "Tet auténtico"... y el VC sufriría las consecuencias de semejante ofensiva poco planificada (aunque, tal vez, las consecuencias para el VC fueran menos graves en cuanto a pérdidas). Yo mantendría, eso si, las operaciones mas "mediáticas" (o sea, llevar la guerra a Saigón para impactar a los medios de comunicación estadounidenses).
Disculpen la tardanza... :marino:
El problema que yo le veo a un mini-Tet es precisamente que sea una respuesta apresurada a la invasion de Laos y al final del dia no sea sino un intento desesperado de influenciar los eventos sin llegar en realidad a afectar significativamente las acciones en el sur. Habria que tomar con pinzas como hacerlo y que le resulte al NVA esa movida.

Saludos :cool2:


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Mensaje por flanker33 »

Bienvenido a bordo KL… :saludo2:
El problema que yo le veo a un mini-Tet es precisamente que sea una respuesta apresurada a la invasion de Laos y al final del dia no sea sino un intento desesperado de influenciar los eventos sin llegar en realidad a afectar significativamente las acciones en el sur. Habria que tomar con pinzas como hacerlo y que le resulte al NVA esa movida.

Algo de eso puede haber, sin duda. La invasión de Laos sería coger un poco a contrapié a Hanoi y el Vietcong, con una nueva realidad de un día para otro bastante peligrosa para ellos. Una reacción apresurada y un tanto desesperada para intentar influir en la situación no sería descartable. Yo el mini-Tet (por llamarlo de alguna manera) lo veo como una ampliación de las actividades guerrilleras, terroristas y de propaganda del Vietcong por todo el país, con especial énfasis en las ciudades y zona costera, pero sin llegar al nivel de actividad del Tet. El NVA debería seguir con sus batallas fronterizas para atraer a las fuerzas aliadas lejos de las ciudades y zona costera y retenerlas allí, a la vez que envía alguna fuerza que otra a la zona de Tchepone y amplía sus acciones en el I Cuerpo.

Las bajas que podría tener el Vietcong en una situación así serían altas, sin duda, pero la idea sería retener el máximo de fuerzas aliadas en el sur y crear una sensación de inseguridad entre la población y los medios de comunicación estadounidenses, que narrarían como a pesar de la invasión, el enemigo sigo tomando iniciativas y es capaz de realizar ataques importantes o al menos “mediáticos”. Su utilidad casi sería más política y propagandística que militar, pero tampoco hay que pasar por alto ese aspecto del conflicto, y Hanoi, no creo que tuviera muchos prejuicios para ordenar algo así, si considerase que beneficiase a sus planes.

Saludos.


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Mensaje por flanker33 »

Capítulo 7. Reacciones

Poco después de las once de la mañana del día después de la invasión norteamericana de Laos, como ya se comenzaba a conocer en todo el mundo la operación “Nathan Hale II”, el comité de seguridad para el Estado del gobierno de la República Popular de Vietnam se encontraba reunido en una sobria sala decorada con muebles de estilo colonial y con cierto olor a humedad, en el interior de un edificio gubernamental secreto en el centro de Hanoi. La reunión estaba siendo tensa y algo bronca, y tras los reproches iniciales de unos a otros miembros de las distintas facciones del gobierno sobre cómo había podido ser posible aquella acción imperialista, el debate se estaba reconduciendo a algo más constructivo en forma de información, opiniones y toma de decisiones, que era lo que se esperaba de aquellos hombres.

-...en general en todo el mundo, el movimiento contra la guerra ha reaccionado de manera contundente contra esta nueva agresión imperialista, y no solo en el bloque socialista, si no en el mundo occidental e incluso en los propios Estados Unidos – dijo el ministro de asuntos exteriores, mientras el Presidente Ho Chi Minh no podía evitar una leve sonrisa al oír como la propia sociedad norteamericana se revolvía contra sus amos. - Todo esto nos favorece, y vamos a seguir apoyando todas y cada una de esas manifestaciones de repulsa, aunque también hay que decir que algunos medios de comunicación norteamericanos están lanzando la idea de que se ha iniciado la batalla decisiva para ganar la guerra, y que la invasión de un país neutral era necesaria vista la “invasión” de facto que nosotros hacemos del país. Puede que ese mensaje cale entre su población, al menos mientras no demos un giro a los acontecimientos y comiencen a llegar grandes cantidades de bolsas de cadáveres a América procedentes de Laos.
-¿Y la ONU que ha dicho? - quiso saber el presidente mientras sorbía un poco de té.
-Camaradas, el Secretario General de la ONU U Thant, se ha limitado a pedir contención a los contendientes y ha condenado la acción norteamericana, pero poco más se puede esperar de las Naciones Unidas, al menos de momento. Los soviéticos me han asegurado que promoverán una resolución del Consejo de Seguridad pidiendo la condena de la invasión, aunque no hay muchas opciones de que prospere.
-¿Y que nos ha dicho a nosotros la Unión Soviética? - preguntó Vo Nguyen Giap, el comandante del Ejército Norvietnamita.
-El embajador me ha asegurado que redoblaran sus esfuerzos en suministrarnos todo el armamento que necesitemos, así como ayuda económica y técnica adicional, además de todo su apoyo diplomático y propagandístico en el exterior que puedan aportar.
- ¿Y China? - preguntó Le Duan, el Secretario General del Partido de los Trabajadores de Vietnam, y miembro destacado de la facción pro-china del politburó.
-Pekín se ha expresado en términos muy similares, pero nos ha ofrecido que si necesitamos alguna cooperación o ayuda especial, que están dispuestos a escucharnos.
-¿Más soldados chinos en nuestro territorio? - intervino Giap
-Evidentemente a eso se refieren.
-¿Cree que deberíamos aceptar su oferta, General? - quiso saber Le Duan, el hombre que llevaba las riendas del país en los asuntos del día a día y que cada vez se perfilaba más como el sucesor del Presidente Ho Chi Minh, al que aún le eran consultadas las cuestiones de importancia, y aquella sin duda lo era.
-Dependerá de cual sea nuestra reacción al ataque americano.
-Y eso es lo que debemos tratar a continuación – intervino el Presidente Minh. - Nguyen, ¿cómo piensas que deberíamos responder en el plano militar?
- Camarada Presidente, la ofensiva americana nos ha colocado en una situación delicada. Como saben estamos a medio camino de finalizar los preparativos para la ofensiva/levantamiento general que debía ocurrir durante el Tet del próximo año. Ahora esa ofensiva parece imposible dada la actual situación, pero al menos tenemos a parte de las tropas enemigas lejos de sus bases, de las ciudades y zona costera, tal y como teníamos planeado. Todavía tenemos suministros, pero comenzarán a escasear si no abrimos de nuevo la ruta por Laos. De momento recomendaría incrementar la llegada de suministros a través de Camboya, a la vez que nuestros camaradas del Movimiento Nacional de Liberación de Vietnam del Sur aumentan sus actividades de manera importante por todo el país.
-¿Cree que con aumentar la actividad guerrillera será suficiente? - interrogó Le Duan que era un firme partidario de emplear al Ejercito convencional norvietnamita en la lucha por la liberación de sus hermanos del sur.
-Por supuesto que no. Según nuestros informes hay todavía una considerable presencia militar enemiga en el sur, casi han dejado el mismo número de tropas que tenían, y ya sabemos que en los dos últimos años, nuestros camaradas del Vietcong han sufrido graves pérdidas. Por suerte ahora han tenido un tiempo para reponerse y están en condiciones de hacer lo que planteo – hizo una pausa para mirar a todos los presentes. - Y lo que planteo es que esas acciones han de llevarse no solo a cabo en las zonas rurales, en las montañas o en el delta del Mekong, si no, principalmente en las ciudades, las zonas costeras y bases imperialistas, para hacer ver al enemigo que su invasión no nos detendrá, pero sobre todo para que la población civil se dé cuenta que está mal protegida y reclame más seguridad en zonas que ahora consideran seguras, Eso significará que deberán enviar refuerzos a las ciudades y zonas costeras más pobladas, y con un poco de suerte, nos facilitaran nuestra labor cerca de la zona desmilitarizada y en Laos.
-Hemos pensado que algunas acciones de carácter propagandístico y psicológico contra instalaciones o edifico norteamericanos en Saigon o sus alrededores, pueden ser importantes para minar la popularidad de la invasión en la opinión pública norteamericana – intervino el General Van Tien Dung, segundo de Giap. - Creemos que la embajada norteamericana o las nuevas instalaciones de su mando militar en Vietnam, el “pequeño Pentágono” creo que lo llaman, serían oportunidades excelentes, y si logramos eliminar al embajador o al General Westmoreland, mejor que mejor.
-…cof…cof..cof…eso sería un golpe de efecto importante – aseguró el presidente Minh, en medio de un ataque de tos.
-Eso está muy bien, pero nuestra principal ruta de abastecimiento de armas y municiones al sur seguirá estando cortada – intervino de nuevo el Secretario General.
-Es que eso solo sería una primera fase – prosiguió ahora Tien Dung. - En paralelo a ello, debemos reforzar y ampliar nuestros ataques contra la ruta de abastecimiento de la invasión, principalmente la base de Da Nang y las rutas 1 y 9, con nuestras unidades de los Frentes B-1, B-4 y B-5. Tengamos en cuenta que sus operaciones en Laos están al final de una larga y delgada línea de suministros, y si logramos interrumpirla, o al menos dificultarla, estarán en grave peligro.
-Por desgracia – intervino ahora su superior – en los últimos meses, han reforzado y aumentado en gran medida la seguridad de la zona con al menos el equivalente a dos de sus divisiones, que como casi todos los presentes saben, cada una de ellas hace por dos de las nuestras al menos. Por lo tanto, apenas se pueden sacar unidades de esos frentes para operar contra la invasión en Laos, a lo sumo una División, y esta, junto a la 325 División que ya está en la zona y a alguna más que extraigamos del sur, deberán emprender acciones de hostigamiento contra las fuerzas enemigas en Laos.
-¿Hostigamiento? - preguntó el ministro de asuntos exteriores.
-Efectivamente. Para plantearnos una ofensiva seria que sacara al enemigo de Laos, deberíamos enviar muchas más fuerzas, y almacenar muchos más suministros. Ahora carecemos de ambas cosas en la zona, más cuando la Base 604 ha quedado en poder del enemigo.
-Pues entonces debemos hacer acopio de hombres y material cuanto antes para lanzar el ataque lo más pronto posible – dijo enfáticamente Le Duan. - Podemos hacer que sea un segundo Dien Bien Phu, pero a mucha mayor escala.
-Necesitaremos una cantidad muy grande de soldados – respondió Tien Dung.
-Y entonces, ¿no sería de gran utilidad la ayuda de nuestros camaradas de Pekín? Con sus tropas podríamos sustituir a las nuestras en el norte del país, y liberar una gran cantidad de soldados para luchar contra los imperialistas – apostilló Le Duan, llevándose la conversación a su terreno, mientras Giap se revolvía inquieto.
-Es posible, pero en todo caso necesitaremos bastantes semanas o meses incluso para poder realizar una operación así.
-Camaradas, mis conocimientos militares no son comparables a los suyos, por supuesto – dijo en tono de falsa modestia el secretario general, al que se le intuía una ligera sonrisa tras la cortina de humo que producía el cigarrillo que fumaba – pero ¿no podríamos utilizar los preparativos para la ofensiva general en nuestro beneficio en este caso, e incluso, ya que se requiere un cierto tiempo, lanzar esa ofensiva, realizarla en el Tet, tal y como lo teníamos planeado, solo que esta vez con un objetivo diferente? Si lo hacemos bien, podríamos conseguir resultados parecidos, quizás intercambiando la reacción de la población survietnamita, por la americana, al ver que sus tropas sufren un enorme descalabro en su acción más polémica e infortunada.

Giap apreciaba las palabras de Le Duan en lo que valían, y aunque no le gustaba tener más tropas chinas en Vietnam, él mismo había previsto algo parecido a lo que ahora planteaba Le Duan. Solo con acciones guerrilleras y de hostigamiento, sería imposible sacar a los imperialistas de Laos.

-Coincido en gran parte con el camarada secretario general – dijo el veterano y respetado General – creo que debemos prepararnos para una eventual ofensiva en Laos que conduzca a una victoria decisiva. Pero mientras, tenemos que llevar a cabo las acciones que acabamos de exponer para que se creen las condiciones necesarias que favorezcan la victoria, además de “auxiliar” a nuestros camaradas del Pathet Lao a tomar el poder en Vientiane de una vez por todas.

De todos era sabido que las tropas norvietnamitas en el norte de Laos eran un firme baluarte para sus camaradas comunistas del Pathet Lao, y que la presencia de estas era tolerada por Washington que miraba para otro lado, en vista a sus intereses, pero que se entendía que en caso de alteración del “status quo”, Hanoi seguramente tomaría el control de su vecino de modo más o menos fácil, o al menos del norte del país y de su capital.

-Dentro de un terreno más táctico - dijo el segundo de Giap - recomiendo solicitar a nuestros camaradas soviéticos y chinos, una gran cantidad de armas antiaéreas, principalmente cañones de 23 milímetros, pero también ametralladoras pesadas o cañones de 57 mm. Debemos tener una adecuada cobertura antiaérea en la zona si vamos a emprender acciones convencionales contra los americanos, y además, hacer de los helicópteros enemigos nuestros principales objetivos, tanto en el aire como en sus bases. En una operación como esta, si les negamos el uso de sus helicópteros, la operación se vendrá abajo por sí sola, o al menos serán mucho más débiles cuando ataquemos. - Tras una pausa finalizó. - También deberíamos solicitar algunos aviones más avanzados que dispongan de un radio de acción suficiente para llegar desde nuestras bases en el norte a la zona de Tchepone para al menos interferir en las operaciones aéreas enemigas, ya que crear o ampliar bases más al sur sería casi imposible debido a que estarían fuera de las áreas de exclusión autoimpuestas por los mismos norteamericanos.
-Pero llevará varios meses entrenar a las tripulaciones de esos aparatos – dijo uno de los presentes.
-Quizás haya otras opciones...- dijo enigmáticamente el secretario general.

Entonces el Presidente Ho Chi Minh, al que cada vez se le veía más decaído por efecto de su delicado estado de salud, ya cansado de una reunión tan larga y tensa, y haciendo uso de su autoridad, intervino para finalizarla.

-Camaradas, todos hemos oído la información aquí presentada y las posibles acciones a tomar. Considero que dejemos trabajar a nuestros camaradas militares para que en breve nos planteen algo más concreto en cuanto a opciones militares, y al ministerio de exteriores, sobre acciones diplomáticas y políticas a nivel internacional y con nuestros aliados socialistas. Propongo que nos volvamos a reunir dentro de un par de días para tomar las decisiones oportunas, pero de momento deberíamos ordenar al FLN que planeen y ejecuten lo aquí hablado, así como a nuestro Ejército, el acoso a las fuerzas enemigas en la zona de Laos y su línea de abastecimiento. ¿Cuál es su opinión?

Todos los asistentes asintieron con la cabeza en gesto, mitad de aprobación, mitad de reverencia. Necesitaban conocer más sobre las posibles opciones antes de tomar una decisión estratégica, pero las líneas maestras de su respuesta ya habían sido esbozadas en aquella reunión.


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Mensaje por sergiopl »

Excelente :thumbs:

Por cierto:
-Hemos pensado que algunas acciones de carácter propagandístico y psicológico contra instalaciones o edifico norteamericanos en Saigon o sus alrededores, pueden ser importantes para minar la popularidad de la invasión en la opinión pública norteamericana – intervino el General Van Tien Dung, segundo de Giap. - Creemos que la embajada norteamericana o las nuevas instalaciones de su mando militar en Vietnam, el “pequeño Pentágono” creo que lo llaman, serían oportunidades excelentes, y si logramos eliminar al embajador o al General Westmoreland, mejor que mejor.
Bueno, bueno, bueno... con esa frase me ha calentado la cabeza y ya imagino un doble ataque simultaneo contra la Embajada y el "Pequeño Pentágono", que acabe con Westmoreland defendiéndose revolver en mano mientras un equipo de TV aterrorizado, que iba a entrevistar al general, lo graba todo (los militares tratarán de quitarles la cinta, pero los periodistas son hábiles para esconderlas y dar "cambiazos"... o eso parecía en una película que no recuerdo... ¿o era en la mítica serie "V"?).

¿Y se imagina que el periodista fuese el propio Walter Conkrite que está allí para cubrir la invasión de Laos? Igual ya me he pasado :green:


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Mensaje por flanker33 »

Bueno, bueno, bueno... con esa frase me ha calentado la cabeza y ya imagino un doble ataque simultaneo contra la Embajada y el "Pequeño Pentágono", ...
:sisisi: Hola Sergiopl, me gusta su idea, se la compro :thumbs:

Ahora toca pensar en el siguiente capitulo...¿alguna propuesta/ idea?

Saludos.


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Mensaje por sergiopl »

flanker33 escribió:Ahora toca pensar en el siguiente capitulo...¿alguna propuesta/ idea?
Así a bote pronto... se me ocurren 2 alternativas:

1ª opción: Un "in crescendo" en la zona de Laos. Un combate de mas entidad que los anteriores utilizando a los personajes ya empleados, para transmitir que la campaña se "calienta".

2ª opción: De utilizar a un personaje del Vietcong para narrar los ataques contra la Embajada y el "Pequeño Pentágono", se podría presentar ahora y hablar un poco de los problemas para organizar esos ataques y el resto del "Mini-Tet" antes de la ofensiva prevista para el año siguiente. Aunque esas acciones también pueden ser narradas desde el punto de vista de Westmoreland... o incluso el de Conkrite :green: , lo cual les daría incluso mas dramatismo.


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Mensaje por flanker33 »

Hola a todos,

primero un par de documentos relacionados con el tema, (en inglés):

Las diversas opciones que Westmoreland barajaba para ganar la guerra
La estrategia alternativa de Westmoreland 67-68

La operación LAM SON 719, que puede servir para conocer información bastante interesante sobre como se produjo una incursión parecida a la que aquí intentamos recrear.
Monografías de Indochina. LAM SON 719

Hola sergiopl,

Me parece bien, incluso haría que fuesen los dos, primero un capitulo con combates en Laos, como usted dice con los personajes ya empleados, una acción de hostigamiento del NVA, una patrulla del Army o los dos, explicando el desarrollo de los primeros días de la operación "Nathan Hale II" en Laos y el I Cuerpo.
Y luego, otro capitulo con lo del ataque a Westmoreland y la intensificación gradual de las actividades guerrileras por todo el país. Este lo había pensado desde los dos puntos de vista, de los incursores del vietcong, o desde la del General, pero desde el punto de vista de los periodists tampoco está mal...habra que investigar un poco a Conkrite :thumbs:

Todavía se admiten propuestas y comentarios.

Saludos.


"Si usted no tiene libertad de pensamiento, la libertad de expresión no tiene ningún valor" - José Luís Sampedro
sergiopl
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Mensaje por sergiopl »

flanker33 escribió:Este lo había pensado desde los dos puntos de vista, de los incursores del vietcong, o desde la del General, pero desde el punto de vista de los periodists tampoco está mal...habra que investigar un poco a Conkrite :thumbs:
Tras ver el programa en el que Conkrite (tras el Tet) decía que la guerra no podía ganarse, se cuenta que LBJ sentenció: "si he perdido a Walter, he perdido a la clase media". Así era de influyente (aunque posiblemente LBJ no dijera eso, ya sabemos como son estas cosas :green: ).

El final del famoso reportaje:


Conkrite durante el Tet:
Imagen

PD: Ahora veo que es "Cronkite" y no "Conkrite"... :cabeza:


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flanker33
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Mensaje por flanker33 »

Capítulo 8. Cruzado


En medio de aquel intrincado y tupido bosque, donde el verde de las hojas y el marrón grisáceo de los troncos se mezclaban con las oscuras sombras que proyectaba la cubierta vegetal de las alturas, el bochorno y los insectos hacían insoportable la existencia de los hombres que se atrevían a adentrarse en aquel paraje perdido de Laos. Y aquel día, el cuarto desde que comenzara la operación “Nathan Hale II”, era la sección del Teniente Ray Anderson la que avanzaba lenta y penosamente entre aquella maraña de árboles, vegetación y terreno escabroso, con la misión de encontrar y destruir unos emplazamientos de artillería antiaérea situados, supuestamente, en lo alto de una pequeña colina no muy lejos de allí, y que estaban haciendo la vida imposible a los helicópteros que se dirigían a su Base de Apoyo de Fuego, recién terminada. Y así, aquella mañana el Teniente Ray y sus hombres habían abandonado la relativa seguridad de su nuevo “hogar” para hacer más segura y fácil la vida de los aviadores y permitir la llegada de los vitales suministros por vía aérea.

Avanzando en medio de la columna, con su M-16 en ristre, Bobby Farris mantenía una parte de su cerebro en alerta, mientras la otra no dejaba de dar vueltas sobre el compañero que tenía delante de él. Y es que tenía que reconocer que el especialista de 5ª Samuel “Doc” Martin, era un personaje de lo más interesante. Afroamericano de algún estado sureño, era lo que se había dado en conocerse como un “cruzado”, un soldado que se alistaba voluntario en aquella guerra tan cuestionada en su país y en todo el mundo, por unos ideales que podían ser de los más variados. Dichos ideales iban desde los fervientes anticomunistas a los más patriotas, pasando por todo un amplio abanico de ideas como las religiosas o incluso las humanitarias.
Lo llamaban “Doc”, en lugar del más común “sanitario”, porque Samuel había concluido sus estudios de medicina justo antes de alistarse para Vietnam, y estaba bastante mejor preparado que otros sanitarios del ejército que tan solo pasaban por un curso una vez en él. Y aquella era solo una de las primeras curiosidades de aquel idealista, la de que pudiendo haber sido oficial, se alistó como simple soldado raso. Tampoco quiso estar en un cómodo puesto de retaguardia, en algún hospital en Saigón o alguno de campaña, no, el buscó desde el primer momento estar en una unidad de combate en el frente, ver de cerca el sufrimiento de sus compañeros y ayudarlos en la medida de sus posibilidades.

Era mayor que la mayoría de sus compañeros, y hacía un poco de padre de todos, a la vez que ejercía de guía espiritual, dadas sus profundas convicciones religiosas. Y es que esa era otra de sus contradicciones, ya que según él mismo, su principal motivación y lo que le había hecho estar allí, era la de salvar la vida del prójimo, y sin embargo colgaba una Colt .45 al cinto, y según reconocía en voz baja, como si se avergonzara de ello, había matado al menos a tres enemigos en los meses que llevaba de servicio en Vietnam. Por lo demás era una persona afable y encantadora a su modo, siempre dispuesto a dar un buen consejo o a escuchar a los demás, en definitiva, una persona con demasiado buen carácter y bondad para una guerra tan despiadada como aquella. Quizás por eso le había caído bien a Farris desde que lo conoció, en aquella jungla de jóvenes hostiles con instintos primarios que le parecieron el resto de sus compañeros de escuadra al poco de llegar a Vietnam.

Ahora, y tras unos días en el frente, la actitud de sus compañeros había cambiado un poco con respecto a él. La actitud negativa y provocadora con el novato se había relajado por parte de sus compañeros, y ahora ya se podía comunicar como una persona medianamente normal. Seguro que la mediación de Rick y de “Doc”, había tenido algo que ver, pero también el hecho de haber estado bajo el fuego enemigo con ellos, y no haberla cagado…al menos por el momento, había influido.

Y andaba Bobby pensando esas cosas cuando una explosión sacudió la parte delantera de la columna. Todos se agacharon o se echaron al suelo, todos excepto “Doc”, que se puso a correr hacia donde había sonado la deflagración. Al llegar al inicio de la columna, halló a un soldado muy mal herido que estaba siendo atendido por el sanitario de la escuadra que iba en cabeza.

-¿Qué tenemos Andy?
-Una puta mina “Doc”…tiene muy mal la pierna izquierda y esquirlas en el vientre y en el pecho. Es el jodido novato de la escuadra…pobre chaval – dijo el sanitario mientras este sollozaba y gritaba por igual.
-¿Morfina?
-Se la acabo de administrar.
-Vale…déjame sitio…compresión aquí…voy a hacerle un torniquete…

Y mientras “Doc” atendía al pobre desgraciado que había cometido la torpeza de pisar la mina, los demás soldados tomaban posiciones defensivas. Estaban próximos a la colina donde debían destruir las piezas antiaéreas enemigas y aquella mina en territorio enemigo solo podía significar que “Charlie” estaba cerca, y que ahora sabían que había norteamericanos andando por allí.

Tras unos minutos de dura lucha contra las profundas heridas, el joven soldado finalmente halló la muerte. Las heridas eran simplemente demasiado graves como para atenderlas en aquella jungla, e incluso en un hospital hubiese sido muy difícil salvarle la vida, pero no por eso “Doc” dejó de maldecir por no haber podido salvarle la vida.

-¡Joder, joder, joder…puto novato!… ¿por qué coñ* te has muerto?
-Vale “Doc”, déjalo, ya está…no tenía remedio.
-Mierda de minas y de novatos que no miran por donde van.
-Cubridlo, voy a dejar a un par de hombres con él, luego lo recogeremos a la vuelta – ordenó el Teniente Ray Anderson, de pie a la espalda de “Doc”.

Así que mientras “Doc” le daba una especie de extremaunción y le cerraba los ojos, el sanitario sacó una bolsa negra de su mochila y cubrió el cadáver.
A continuación, el Teniente se puso a repartir órdenes entre los dos sargentos de sus escuadras. Con el contratiempo de la mina, la baja y el ruido producido, tenía que hacer su jugada. La escuadra del sargento Barelli seguiría en cabeza y se dirigiría hacia la colina por la vía más recta, con el Teniente marchando con ellos. Con esto esperaba atraer al enemigo que defendía la colina contra ellos. Mientras, la escuadra del Sargento Carter daría un rodeo hacia el oeste, y luego al norte, para atacar la colina desde la dirección opuesta y pillar a los defensores por sorpresa. Quizás funcionara, quizás no, pensaba “Doc” mientras trataba de sacarse la imagen del recién fallecido soldado.

-Muchachos, nos vamos ya. Vamos a rodear la colina y joderlos por detrás…justo como te gusta a ti “cagón” – dijo el Sargento a su escuadra intentando hacer una gracia. – Venga, en marcha, deprisita y en silencio. Rick, Miller, vosotros vais en cabeza. Novato, a retaguardia.

Tras las instrucciones y con un dedo corazón levantado de “cagón” contra el Sargento, la escuadra se puso en movimiento, dejando a sus compañeros de la otra escuadra durante unos minutos más en aquel lugar para darles el tiempo necesario.
Farris, aunque todavía no se le había quitado el miedo de patrullar por la jungla sin apenas ver más allá de unos pocos metros, ya se sentía más confiado, y más si a su lado iba Rick o “Doc” como en aquel momento, donde Martin avanzaba con el ceño fruncido a unos pasos delante de él.

-Tranquilo “Doc”, hiciste todo lo que pudiste – dijo en voz baja Farris en un intento de consolarlo.
-Y tú que sabrás jodio novato… - susurró con gesto enfadado, pero a los pocos segundos volvió a hablar. – lo siento, tú no tienes la culpa…pero no tengas prisa en reunirte con nuestro Creador ¿de acuerdo?
-Descuida, tengo planes para cuando esto termine, y no pienso dejar mis tripas en este país de mierda.
-Esa es la actitud, pero recuerda que nadie sabe lo que le depara el futuro, y mucho menos en esta puñetera guerra. Mejor no hagas muchos planes, y vive como Dios manda el día a día.
-Amén – respondió medio en broma medio en serio Farris, y ambos volvieron a observar el silencio que el Sargento había ordenado.

Varios minutos después, y mientras estaban acercándose a su destino detrás de la colina, comenzaron a escuchar el tronar de los AK-47 y los M-16. “Ya han establecido contacto con “Charlie” pensó Farris, que se iba adaptando a la jerga con bastante rapidez, “Ahora a ver si nosotros tenemos suerte”. Bobby veía como la cumbre de la colina estaba bastante castigada por el fuego de artillería y las bombas de la aviación. Sin duda había recibido algunos “cariños” de la potencia de fuego norteamericana, pero sin embargo, de algún modo, los norvietnamitas seguían disparando desde allí a los helicópteros. Les habían dicho que por lo menos un cañón de 23 mm y varias ametralladoras pesadas se debían encontrar allí, y seguro que no iban a estar desprotegidas. Quizás hubiera suerte y los de la escuadra de Barelli los atrajesen a todos…quizás.

Cuando la columna se detuvo un momento al haber llegado al punto escogido por el sargento para el inicio de la ascensión a la colina, “Doc” se giró hacia Farris.

-¿Sabes lo que son las ratas de túnel? – le preguntó.
-No.
-Pues seguramente hoy lo sepas…esos cabrones solo pueden estar bajo tierra para haber escapado del fuego purificador que les ha llovido.
-¿Es peligroso?
-jajajaja…que gracioso eres Bobby…pero tranquilo, supongo que el Sargento no te escogerá a ti teniendo a Rick y a otros veteranos para esa tarea.

Seguía oyéndose el tableteo de las armas automáticas en la otra cara de la colina, pero ahora con fuego de mortero añadido. En ese momento, Carter dio la orden de avanzar hacia la cresta de la colina y apenas habían avanzado unos metros cuando comenzaron a llover proyectiles de grueso calibre sobre la escuadra de Farris. Al menos tres ametralladoras de 14,5 mm escupían fuego hacia abajo desde lo alto de la colina. Era una situación terrible para Farris que no había estado bajo esa intensidad de fuego, y la cosa empeoró cuando unos segundos más tarde, comenzaron a caer proyectiles de mortero sobre ellos.

-Vamos Bobby, sígueme – le ordenó “Doc” – tenemos que dispersarnos y movernos o nos van a coser a tiros.
-Detrás de ti – dijo Farris mientras se incorporaba y con medio cuerpo agachado seguía a su compañero.

Los demás soldados hicieron algo parecido. Corrieron en direcciones opuestas y tras haber avanzado un poco, se tumbaron cuerpo a tierra tratando de buscar el mejor refugio posible. Algunos seguían avanzando poco a poco, reptando o con pequeños saltos, pero pronto llegó la orden de Rick de que todo el mundo se quedara quieto. Iba a pedir una misión de fuego sobre la cresta. Estaban muy cerca de ella, pero el veterano tejano sabía lo que se hacía y era bueno en la tarea de dirigir el fuego artillero, así que tras solicitarlo y un par de disparos para reglar el tiro, una batería de seis piezas de obuses del 105 barrieron la cima de la colina durante cinco minutos. Rick fue guiando a sus compañeros hacia arriba, hasta el límite de lo que le pareció prudencial para no tener bajas por fuego amigo, y tan pronto como terminó el bombardeo, los hombres de la escuadra, a la orden del tejano, actuaron al unísono y en una rápida carrera se plantaron en la cumbre.

Farris iba esta vez por delante de “Doc” y cuando llegaron, la cima se encontraba esta todavía inmersa en la humareda provocada por la artillería y la visibilidad era reducida, así que Bobby no sabía muy bien que esperar y se movía nervioso con su fusil apuntando a todos lados. Pero no se percató de que de un hueco en la tierra a sus espaldas, aparecía un soldado norvietnamita con un AK entre sus manos. Este, al ver al norteamericano, levantó el arma, pero “Doc” que si lo había visto y lo tenía a menos de dos metros, no iba a permitir que aquello sucediera y le descerrajó dos tiros en la cabeza con su .45. Farris se volvió asustado hacia donde había oído los disparos y pudo ver como otros enemigos comenzaban a salir de lo que parecía un bunker subterráneo. Guiado por el instinto más que otra cosa soltó una ráfaga que casi le vacía el cargador, dejando a dos norvietnamitas más con las tripas fuera de su cuerpo, y acto seguido, “Cagón” lanzaba una granada a través de hueco de donde habían salido los enemigos, explotando dentro. Si había más enemigos allí, ahora debían estar muertos o heridos se dijo Farris, pese a lo cual, e imitando a su compañero, y con las manos todavía temblorosas, “calentó” otra granada y la volvió a introducir en el bunker provocando otra deflagración.

-Bien hecho novato – le dijo “Cagón” Murphy – cúbreme desde aquí fuera, voy a entrar.

Y dicho esto, se quitó el casco y cogió un revolver del .357 que llevaba escondido en el uniforme con una mano y una linterna en la otra, y se metió con cautela en el hueco que había en la tierra. Mientras Bobby Farris protegía a su compañero desde el exterior, con “Doc” a su lado, se dio cuenta que todavía resonaban algunos disparos y explosiones en lo alto de aquella colina. Tras un par de minutos, oyó a Murphy llamarle.

-Novato, voy a salir, no dispares ¿vale?
-De acuerdo, sal, yo te cubro – dijo sin saber si tenía mucho sentido la frase en aquellas circunstancias.
-Todo “despejado” – dijo el neoyorquino – hemos hecho una buena limpieza ahí abajo. Te has portado bien novato, quizás tenga una oportunidad en esta escuadra.

Pero nada más terminar esas palabras, la voz sargento Carter se oyó claramente sobre el ya escaso ruido de fusilería.

-¡¡“Doc” ven aquí ya!! ¡¡Han alcanzado a Rick!!

“Mierda”, pensó Farris, a la vez que veía salir a “Doc” disparado hacia donde estaba el Sargento. Bobby siguió al doctor y pronto vio como el veterano Rick Méndez yacía al lado del Sargento con el uniforme ensangrentado, pero con los ojos abiertos y gesto calmado, pese a los dolores que debía estar sufriendo.

-A ver, dejad espacio para “Doc”…volver a revisar los bunkers y formar un perímetro defensivo hasta que tengamos estabilizado a Rick – ordenó Carter. – Smith, utiliza esa bonita radio que tienes a la espalda y pide un “Dustoff” para el tejano, lo va a necesitar – dijo refiriéndose a un helicóptero medicalizado que extrajese al soldado hasta un hospital de campaña para tratar sus heridas.

Farris se fue hasta un extremo de la colina donde podía ver la cara por donde había llegado la escuadra de Barelli con el Teniente Anderson. Ahora ya no se oía ningún combate, y pronto pudo ver como sus compañeros de la otra escuadra subían cautelosamente colina arriba. Iba a hacerles señales para que supieran que tenían la cima bajo su control, pero “Granjero” le paró.

-Espera, tienen que establecer contacto por radio primero. Si no pueden, ya les haremos señales.
-Ah…vale, no lo sabía.
-Hemos encontrado los antiaéreos desmontados en los bunkers, ahora son historia.
-Bien, al menos esta vez sí que han acertado los de inteligencia. Espero que haya merecido la pena.

Y mientras observaba como los soldados de Barelli se detenían por unos minutos, y pensaba que el trabajo ya estaba realizado, no dejaba de lanzar miradas furtivas a “Doc”, que trataba de estabilizar al que podía considerar lo más parecido a un amigo que tenía en aquel maldito agujero. Ojala Rick no necesitara una bolsa oscura…



… más tarde, en otro lugar de Laos no muy lejos de allí…


Mientras el sol caía sobre el horizonte a sus espaldas, un grupo de soldados del Ejército norvietnamita avanzaba con suma cautela entre la vegetación, tratando de no hacer ningún ruido. El soldado Truong Tien Minh y su amigo Hao se encontraban entre ellos, y con sus AK-47 fuertemente apretados contra el pecho, trataban de contener la ansiedad y la tensión que se reflejaba en sus rostros.

En los cuatro días que duraba ya la invasión norteamericana de Laos, Minh había sufrido dos ataques aéreos y un bombardeo de artillería pesada, y milagrosamente, tan solo tenía algunos rasguños y magulladuras por ello. Él y sus compañeros supervivientes habían sido destinados a una compañía de infantería de la 325º División, que todavía no se había visto envuelta en ningún tiroteo con los imperialistas. En esos días, se había desplazado de aquí para allá, escondiendo los pertrechos que habían podido salvar de algunos bunkers de suministros repartidos por la zona, escondiéndolos en otros, y tratando de evadir a las patrullas americanas que por el momento contaban con la superioridad numérica. Pero todo aquello estaba a punto de cambiar.

El grupo de Minh había recibido órdenes de hostigar una base norteamericana en lo alto de una pequeña montaña, una de las tantas que habían ocupado desde que llegaran y que les servían para intentar controlar el área que tenían alrededor de ellas, con sus armas de grueso calibre y sus patrullas de infantería que peinaban la zona. El mando norvietnamita había decidido, aun estando en inferioridad numérica, hacer la vida de aquellos malditos imperialistas más complicada de lo que lo estaba siendo. Pero no debían asaltar sus posiciones, la prioridad era hostigar al enemigo, producirle bajas y sobre todo, tratar de destruir sus malditos helicópteros. Así que un pequeño grupo equipado con tres morteros de 82 mm, dos ametralladoras RPD y un cañón sin retroceso (CSR) de 75 mm, recibieron la orden de atacar la cima de aquella montaña, con especial interés en alcanzar a algún helicóptero o dañar al menos la plataforma donde aterrizaban.

Así que tras recorrer varios kilómetros bajo la constante presión de no ser descubiertos por los medios aéreos o por las patrullas enemigas, los soldados del NVA avanzaron hasta la posición desde donde lanzarían sus proyectiles contra la base enemiga. Su presencia había pasado inadvertida a los americanos, y Minh se sorprendía de como sus compañeros veteranos avanzaban por aquella maraña de vegetación como si pasearan por el campo, en medio del más absoluto silencio, incluso transportando medios pesados como las placas y tubos de mortero, o el cañón sin retroceso. Pero al fin, y casi al anochecer, estaban allí, con el sol deslumbrando a los defensores y con un objetivo que recortaba su silueta perfectamente sobre el horizonte, ideal para ser atacada a distancia. Los tres morteros y sus dotaciones se quedaron a un kilómetro aproximadamente del objetivo, mientras que los soldados con el cañón y las ametralladoras avanzaron hasta situarse a unos 500 metros, cerca del pie de la montaña. Minh formaba parte del equipo de seguridad, los hombres que debían proteger a las armas colectivas y a sus sirvientes de las patrullas norteamericanas, así que tras instalarse estas en posición de tiro, Minh y sus camaradas se desplegaron formando un circulo a su alrededor, con más hombres en la parte que daba la cara a la base enemiga.

Minh, que en posición cuerpo a tierra y protegido entre algunos árboles, podía observar un campo de hierba alta con algunos arbustos desperdigados frente a él, además tenía una vista privilegiada de la base americana desde allí.
Cuando todo estaba preparado y quedaban pocos minutos para abrir fuego, se oyó en las alturas el ya familiar pero terrible sonido de reactores imperialistas cercanos. Minh miró con pavor a Hao que estaba igualmente asustado, y echó mano instintivamente a su pala para comenzar a cavar un hoyo donde esconderse, a la vez que trataba de contener sus temblores, pero el Teniente que mandaba la sección ordenó que todo el mundo se quedase quieto, no quería que el movimiento fuera detectado por norteamericanos, allí arriba en la base.

Por suerte para ellos, y desgracia de algún otro desdichado soldado del NVA, los reactores imperialistas dejaron caer su mortal carga a unos cuantos kilómetros de allí para acto seguido dar media vuelta y volver por donde habían venido. Entonces Minh y los demás respiraron aliviados, habían tenido suerte esta vez. Y su suerte no terminó ahí. Cuando estaban a punto de abrir fuego, un helicóptero enemigo apareció aproximándose a la base y comenzando la maniobra de aterrizaje. Por fortuna para el Teniente norvietnamita, que no tenía contacto por radio con sus morteros, el sargento encargado de guiar el tiro de sus piezas había observado el helicóptero desde lo alto del árbol al que estaba encaramado para observar el objetivo, y dado que era veterano de muchos combates en Vietnam del Sur, tomó la decisión de no comenzar el bombardeo a la hora fijada, sino esperar a que el helicóptero estuviera posado sobre la plataforma de aterrizaje, antes de abrir fuego.

Minh pudo observar como la primera andanada de proyectiles erró su objetivo. Dos de ellos quedaron demasiado cortos y el otro se pasó de largo. Entonces el CSR disparó también, pero tampoco acertó, fallando por al menos cien metros. Las RPD también se unieron al ataque y en ese momento, los norteamericanos comenzaron a disparar con todo lo que tenían allí arriba. Al principio sin mucho criterio, y disparando un poco hacia todos lados, pero cuando el CSR volvió a disparar y observaron mejor de donde venía el fuego de ametralladoras, concentraron su fuego sobre Minh y sus camaradas.
Mientras, el piloto del helicóptero había comenzado a tomar altura, perseguido de cerca por las balas de las ametralladoras, los proyectiles de 75 mm y los morterazos. Algunos proyectiles de las RPD y varias esquirlas lograron alcanzarle, pero a pesar de causarle daños, el piloto logró salir de allí y regresar a la seguridad de su base en retaguardia, aunque el aparato iba a necesitar algunas reparaciones antes de poder volver a operar.

Los norvietnamitas, pese a haber perdido su principal presa, siguieron disparando durante algunos minutos más para hostigar al enemigo, pero entonces, los obuses de 105 que había en la base comenzaron a afinar la puntería sobre sus posiciones, y el Teniente ordenó el repliegue. No habían tenido suerte al no derribar al helicóptero, pero seguro que lo habían dañado y es posible que hubieran causado algunas bajas allí arriba. El trabajo estaba hecho y mejor salir de allí antes de ser pasto de los obuses enemigos.

Replegarse bajo fuego de artillería era difícil y peligroso, pero quedarse hubiera sido peor. Milagrosamente, ninguno de los camaradas que iban con Minh sufrió herida alguna, pero al llegar a donde se encontraban los morteros, pudieron ver que una pieza y toda su dotación no habían tenido la misma suerte y habían recibido de lleno un proyectil de 105 mm. Los demás habían tenido el buen juicio de marcharse de allí.
Cuando se reunieron todos los integrantes de la sección un poco más allá, el fuego enemigo había cesado, y pudieron respirar un poco más aliviados, acababan de escapar de la muerte por muy poco. Pero esa sensación se vio truncada a los pocos minutos, cuando Hao se dio de bruces con una patrulla americana que los estaba buscando. Disparó instintivamente y logró alcanzar a un enemigo, pero la respuesta del que iba detrás del soldado de cabeza, le dejó una bala en la cadera que le empujó hacia atrás, haciéndolo caer de espaldas.

Los dos grupos se dispararon a corta distancia mientras buscaban donde protegerse. Algunas granadas volaron de un lado a otro, mientras el intercambio de fuego crecía en intensidad. Pero el oficial norvietnamita no estaba interesado en un combate así, por lo que tan pronto como pudo, y amparándose en la cada vez mayor oscuridad de la noche, abandonó la zona llevándose a los dos heridos que le habían producido los imperialistas, y rompiendo el contacto. Los americanos intentaron perseguirles, pero algunas trampas explosivas en el camino de retirada norvietnamita, hizo que se lo tomaran con más cautela, lo que permitió a los comunistas evadirse.

Para Minh había sido su primera experiencia de combate con un enemigo tan cercano, y había gastado cinco cargadores y un par de granadas. El hecho de poder disparar mucho y lanzar explosivos sobre su enemigo le había dado cierto grado de seguridad, pero sobre todo, había logrado protegerse lo suficientemente bien para no ser alcanzado y no quedarse paralizado. Su amigo Hao no había tenido la misma suerte, y aunque parecía que la herida no era muy mala, en aquella selva nunca se podía decir que una herida no fuera a ser mortal. Al menos Hao había salvado al resto de sus camaradas, ya que si no llega a descubrir a los americanos, muchos más hubiesen caído bajo sus balas. Para él ya era un héroe, aunque temiese por su vida.

Ya de noche cerrada se reunieron con el resto de su compañía en el interior de un complejo subterráneo debajo de aquella selva, donde pudieron descansar y comer algo, a la vez que los heridos eran tratados con los escasos medios y medicinas que disponían tras la pérdida de muchos suministros en los primeros días de la invasión. Minh estaba contento de haber sobrevivido, pero temía por la vida de su amigo, y por lo volátil e impredecible que era el peligro ahí fuera. En un momento dado uno podía morir por mil causas, y a algunas ni siquiera las veías venir. Definitivamente, y pese a todo el adoctrinamiento recibido, no le gustaba la guerra.


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Mensaje por flanker33 »

Ahora a pensar en el próximo capitulo. Lo de Cronkite ya le comenté que me parecía bien. Gracias por el enlace. Voy a buscar algo más de info del susodicho.
Que le parece que fuera una entrevista del periodista con Westmoreland en el "Pentagono del Este" el mismo día que lo sucedido en el capitulo 8, por la noche, y que amparandose en la oscuridad, un comando del vietcong ¿con ayuda de algún traidor de la fuerza aérea survietnamita de la base aérea adyacente, entre en el complejo a sangre y fuego? Podía estar coordinado con un ataque a la base, con más comandos o de cohetes.

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