Es un poco cansino seguir con esto, pero, respecto a esa campaña de propaganda que se quiere efectuar en USA, y visto desde la óptica de su población y de sus dirigentes, acabar con esa campaña publicitaria resulta pueril. Supongamos que soy Roosevelt, y que pienso (como en la realidad) que Hitler debe ser destruido. Además de mi enorme prestigio, tengo el apoyo de buena parte de la prensa: por las buenas, o mediante presiones: los magnates de los medios de comunicación de la época sabían que podían criticar pero no ser completamente contrarios a la política presidencial, o Roosevelt podría tener ideas como aplicar la ley anti Trust. Algunos argumentos podrían ser:
“Hitler es un mentiroso”. Verdad. No hay que creerse ni una sola palabra de lo que dice. Sus promesas no tienen ningún valor, aunque diga que vaya a liberar a Francia o a convocar elecciones libres. Lo malo es que hubiesen tenido razón porque, como ya he dicho, en 1941 nadie, absolutamente nadie, creía lo que decía Hitler. Mucho menos a los pocos meses del alevoso ataque a la URSS.
“Hitler va a perder la guerra y por eso quiere que nosotros le ayudemos”. De nuevo, cierto. Es fácil decir que a Hitler le iba a pasar como a Carlos XII o a Napoleón, y cuando ve lo que le va a ocurrir con el invierno ruso, busca como sea la ayuda de otros.
"Cuando acabe con los rusos se volverá contra nosotros". Quién sabe. Pero hasta entonces la política alemana había sido sencilla: quiero lo que tiene mi vecino y en cuanto puedo, lo ataco a traición.
“Hitler ha empezado la guerra. Si quiere paz en Europa, que vuelva a sus fronteras, desmovilice su ejército y convoque una conferencia de paz”. Verdad. En 1931 no había guerra en Europa y fue Hitler quien encendió la hoguera.
“Lo que quiere Hitler realmente es quedarse con lo que ha robado”. Verdad. La oferta llega cuando Alemania corre el riesgo de ser derrotada en la URSS. No hizo ofertas similares después de conquistar Francia o los Balcanes.
“Si firmas un tratado con Hitler solo conseguirás que te traicione”. Verdad. Hitler no respetó ningún tratado, salvo en las partes que eran beneficiosas a los alemanes. En USA se suele citar mucho la frase de Anazagoras: “Si me engañas una vez, tuya es la culpa; si me engañas dos, es mía”.
“Acaba de presentar un ultimátum a un país neutral y viene hablando de paz”. Verdad ¿Cómo sentaría en Estados Unidos el ultimátum a Turquía? Porque los turcos, aunque lo aceptasen, lo que harían sería dar luz a las amenazas alemanas. Aunque solo fuese porque Turquía era un país perdedor de la anterior guerra (del que todos sospecharían revanchismo), y ante el riesgo de ser desmembrado si Hitler perdía, haría eso de nadar y guardar la ropa: “si voy a la guerra es porque Hitler amenaza con bombardear Estambul”.
“Lo de liberar Europa es una mentira, pues en la realidad quiere convertir a esos países en satélites”. Que de nuevo tendría mucho de razón, especialmente tras el ultimátum a Turquía (un país neutral que no se mete con nadie). O tras presionar a Francia y a España para que entren en una guerra que no les beneficia.
“Lo de Katyn ha sido culpa de los alemanes”. Que además, indirectamente, es cierto. Sin la invasión alemana de 1941, las víctimas de Katyn hubiesen seguido tan felices en sus casas. Alemania pactó con la URSS el reparto de Polonia, y consecuencia fueron las matanzas. Por cierto, la revelación de las matanzas de Katyn no consiguió en la realidad que ni un polaco se inclinase por Hitler.
“Stalin mata polacos en Katyn, pero Hitler ha hecho lo mismo en Varsovia”. Verdad. Mira lo que pasó con la “intelligentsia” polaca. En 1939 y 1940 fueron asesinados miles de intelectuales polacos. Matar a Hans Frank no cambia ni una coma: Frank no actuó por su cuenta sino siguiendo instrucciones de Hitler. Su ejecución sería vista como una lucha interna o como un intento de quitarse de encima testigos molestos.
“Lo de Katýn se hace de acuerdo con Hitler”. Falso, pero creíble. Ya he dicho que la URSS invadió Polonia (y los países Bálticos) tras el acuerdo con Hitler, y si Stalin asesina militares e intelectuales, y Hitler asesina a militares e intelectuales ¿Quién no va a creer que lo hacen por un acuerdo?
“Esos polacos prestigiosos son unos traidores vendidos”. Verdad. En la realidad lo de Katyn no consiguió que los polacos apoyasen a Hitler ¿por qué lo iban a hacer en este escenario? Solo lo harían los “Quisling” de turno, es decir, personajes de segunda fila ambiciosos. Los de primera fila habían sido asesinados.
“Los empresarios que quieren negociar con Hitler son unos repugnantes capitalistas”. Verdad a medias. Hay que tener en cuenta que tras la Gran Depresión el prestigio de los capitalistas no estaba en su mejor momento, y la administración Roosevelt ha sido la más “izquierdista” que se ha visto en USA.
“Ford es un nazi”. Casi verdad. Lo más probable sería que los industriales, que no estaban allí por ser tontos, se negasen a recibir a los enviados de Hitler, y además lo hiciesen públicamente. Yo pensaría “ese imbécil mentiroso quiere comprometerme con su enviado” y sin llegar a recibirle haría campaña justo de lo contrario, que soy un antinazi, que detesto a Hitler, que es un mentiroso que con mi nombre quiere engañar a la opinión pública. Lo malo de eso es que yo quedaría obligado a seguir oponiéndome a Hitler. Es decir, que elementos como Rockefeller o Luce. Por cierto, lo de la elección de Rockefeller, ideal: tras pasarse los alemanes años acusándole de ser de ascendencia judía (para desprestigiarle), ahora se va a buscar su apoyo. Y Rockefeller, como es tonto, va y recibe al enviado y se deja fotografiar con él en la puerta.
Ya he dicho que resulta tremendamente improbable que esa “embajada de paz” (pro llamarla de alguna manera” llegue a Estados Unidos sin que sea detenida por un buque de la Royal Navy. O simplemente, hundido el buque que los lleva (así no hay testigos molestos). Aun suponiendo que cruce el Atlántico, es muy dudoso que se le permitiese atracar en un puerto norteamericano, y tampoco creo que México la aceptase (por el riesgo que supone el vecino del norte). Aun, desembarcando, en el primer momento en el que un enviado abriese la boca sería detenido por el FBI (no eran diplomáticos, no tenían inmunidad, y Hoover era muchas cosas, pero amigo de los nazis, no).
Lo dicho: esa campaña, viniendo de una persona honesta, tendría poco futuro ante manipuladores de la opinión pública como eran los políticos norteamericanos, empezando por el presidente, o los editor5es de la prensa.
Como dijo Talleyrand, “lo que no puede ser no puede ser y además es imposible”. Lo de la comisión en Estados Unidos será una “idea genial” pero es absurda.
Para acabar, una perla:
Super Mario escribió:No necesitan atacar a países neutrales como Portugal o España generando un conflicto internacional.
Viniendo de quién ha empezado una guerra mundial, y siendo los dos países dictaduras pronazis, el argumento suena un tanto farisaico.
Saludos