¿Tengo que repetir que Trump no está en sus cabales?PhabulousPhantom escribió: ↑08 Abr 2025, 07:56Pues aquí tenemos al que quería negociar aranceles 0... ahora resulta que no le vale solo con eso, hay que pagarle un pizzo anual hasta que a él le parezca bien.
A los que crean que se puede llegar a un acuerdo con semejante animal, les recomiendo encomendarse a su representante en estos lares, Obescal, y les deseo la mejor de las suertes![]()
No quiero decir que esté como una regadera, pero su deterioro mental por la edad le está produciendo un déficit importante, pero de la manera más peligrosa: puede engañar.
Me imagino que bastantes contertulios habrán conocido casos de ancianos que parecen estar bien y que tienen una conversación coherente, aunque, tal vez, con algún olvido. Pero que sus familiares, si se les pregunta, ponen cara de resignación, porque lo sufren cada día. Entre lso síntomas que pueden padecer esos enfermos están:
- Agresividad y desinhibición.
- Tener comportamiento inapropiado (puede ser sexual o social).
- Pérdida de empatía.
- Dificultad en planificar acciones con una secuencia lógica.
https://es.wikipedia.org/wiki/Demencia_frontotemporal
Vale la pena recordar que varios familiares de Trump están afectos de demencia senil (enfermedad que tiene bastante componente hereditario) y téngase en cuenta que los pacientes no tienen por qué experimentar todos esos síntomas, sobre todo en fases iniciales. Además, se trata de un ególatra que ha conseguido rodearse de una corte de aduladores. Cuidado con ellos, porque llegan a cegarse de tal manera que pierden la objetividad: recuérdese el búnker de Berlín, con los esbirros compitiendo por el favor de Hitler, cuando todo se hundía.
La combinación es horrorosa. Un tipo que ha actuado como un nene de papá, que está convencido en ser el redentor, y que ha perdido los pocos controles que tenía. Con gente que aplaude sus ideas, o que le presenta otras cada vez más estrambóticas.
Imagínense lo que puede ser intentar negociar con un nene malcriado de cuatro años; la diferencia es que a un niño se le puede educar. A una demencia senil, no.
Supongo (como ya he dicho) que no serán pocos los informes de este cariz que ronden por mesas de despacho. Cuestión aparte que los periodistas no se enteren.
Saludos