
MANTA, Manabí. A inicios de julio entrarán a operar los aviones israelíes comprados por Ecuador, una vez que dejen de operar las aeronaves del puesto militar de Estados Unidos
Para que no haya ninguna falla en la estructuración del hangar donde estarán los seis aviones no tripulados que el Gobierno adquirió a su par israelí, Allan Molestina, comandante general de la Marina, constató ayer los trabajos que se hacen muy cerca de la pista de aterrizaje del aeropuerto Eloy Alfaro y que está destinado para el alojamiento de estas naves.
Los aviones, también conocidos como drones asesinos, fueron adquiridos por el Gobierno a Israel Aerospace Industries (IAI) por unos $ 23 millones y operarán en los primeros días de julio, aunque la entrega oficial será el 11 de ese mes. Días atrás, funcionarios del Centro de Operaciones de Avanzada de Estados Unidos (FOL por sus siglas en inglés) ratificaron que las naves por ellos utilizados durante diez años desde Manta dejarán de operar en julio.
Molestina indicó que un grupo de técnicos ecuatorianos ya viajó a Israel a conocer sobre las operaciones tácticas que se emplearán con las naves y en los próximos días irá otra delegación para saber la planificación de estas aeronaves desde el aspecto operacional.
“Tenemos un cronograma que lo vamos cumpliendo, lo único que hacemos es verificar que no vayan a sufrir retrasos, al mismo tiempo coordinar los recursos, porque muchos contratos dependen de que los recursos lleguen a tiempo. Hemos tenido algunos retrasos que van a ser reemplazados haciendo uso de otras herramientas y el 11 de julio serán entregados definitivamente al Estado ecuatoriano y a la Armada”, declaró.
Los seis aviones que llegarán hasta la base aérea de Manta serán dos estratégicos, de una mayor capacidad de vuelo –incluso podrán operar hasta tres horas de reserva en caso de que al llegar a Manta exista un intenso tráfico aéreo–.
Los otros cuatro serán tácticos que son más pequeños que los estratégicos, cuya actividad fue coordinada con las autoridades relacionadas, y además ratificó que su participación desde el aeropuerto Eloy Alfaro de este puerto manabita no representará riesgo alguno para la navegación aérea.
Los aviones israelíes fueron comprados como parte del plan de soberanía energética, para, entre otros objetivos evitar la fuga de combustibles, aunque también cumplirá con la misión de custodiar la frontera norte y el tráfico de personas a través de embarcaciones.
Molestina señaló que estas nuevas aeronaves operarán con su respectivo seguro en caso de accidentes y daños, esto pese a que no son tripuladas.