Vae Victis

Los conflictos armados en la historia de la Humanidad. Los éjércitos del Mundo, sus jefes, estrategias y armamentos, desde la Antiguedad hasta 1939.
de guiner
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Inciso

Arriba puse el mapa de Galacia que venía en el enlace pero al no ser exacta la situación de los territorios que la rodean (en la época que se está tratando) vuelvo a repetir éste:

Imagen

- Con el añadido de la dirección aproximada (ya la precisaré en su momento) que tomará Cneo Manlio Vulso en su campaña contra los gálatas.


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Continuando.

Manlio Vulso avanza hacia el Meandro y acampa al no poder cruzar el río a pie y tener que reunir embarcaciones para pasar el ejército. Una vez cruzado el Meandro llega a Hiera Come. Desde allí, en una segunda etapa, llega hasta el río Harpaso, en donde se le presentan embajadores de Alabanda pidiéndole que obligase a volver a su obediencia un enclave fortificado que se había rebelado no mucho tiempo antes. Alli se incorpora a las tropas Ateneo, hermano de Átalo, junto a Leuso de Creta y Corrago de Macedonia; con ellos traen 1.000 infantes y 300 jinetes.
El cónsul envía a un tribuno militar con un pequeño destacamento, toma el poblado por la fuerza y se lo devuelve a los alabandeses. A continuación, sin desviarse de su ruta, acampa cerca de Antioquía (Antiochia Ad Meandrum). Seleuco, hijo de Antíoco, llega al campamento romano a entregar el trigo para el ejército (según el acuerdo suscrito con Lucio Cornelio Escipión).
El cónsul parte hacia la localidad de Gordiutico (en la Caria oriental) y desde allí llega a Tabas en tres etapas. En esta región la columna romana es atacada por un contingente de jinetes que logra sembrar cierto desconcierto, siendo rechazados posteriormente a la ciudad. La plaza se rinde y se les exige a sus habitantes 25 talentos de plata y 10.000 medimnos (60.000 modios romanos) de trigo.

Dos días después llegan al río Caso, de donde parten y toman la plaza de Eriza al primer asalto. Llegan a Tabusio, posición fortificada que dominaba el río Indo, y el cónsul manda por delante a Caio Helvio con 4.000 infantes y 500 jinetes. El tirano de la región (bajo su dominio estaban también Cibira, Sileo y Limne) promete paso libre si se respetan los campos, a cambio del pago de 25 talentos con la consiguiente indignación de Manlio Vulso:

"¿Veinticinco talentos dejarán agotada tu tiranía? Pues entonces, si no pagas al contado quinientos talentos en un plazo de tres días, cuenta con la devastación en tus campos y el asedio en tu ciudad"

A fuerza de regateos se acuerda la cifra de 100 talentos y 10.000 medimnos de trigo.



El modio romano era una medida para áridos que equivalía a unos 8,75 litros (8 ¾ L)

http://it.wikipedia.org/wiki/Unit%C3%A0 ... ura_romane

El medimno, medida griega para sustancias secas (grano) variaba segun la zona; el medimno ático equivalía a unos 51,84 litros, el cual no es exactamente el que se menciona



Nota: Este inicio de campaña ya apunta que el carácter de la misma no era exclusivamente punitivo. En la continuación de su marcha, Manlio Vulso:

- "concedió la paz a Termeso recibiendo cincuenta talentos de plata, y otro tanto ocurrió con los aspendios y los otros pueblos de Panfilia"

En Pisidia:

-"obtuvieron la paz a precio de cincuenta talentos y veinte mil medimnos de trigo y veinte de cebada"

Imagen

• El ejército romano aun no se ha internado en territorio gálata.


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Manlio Vulso avanza hasta las fuentes Rotrinas y acampa junto a un poblado llamado Apóridos Comé. Al día siguiente llega allí Seleuco desde Apamea. Después de expedir a Apamea a los enfermos y los bagajes innecesarios y recibir de Seleuco guías para los caminos, sale aquel mismo día hacia la llanura de Metrópolis, y al día siguiente avanza hasta Dinias de Frigia. Desde allí llega hasta Sínada, mientras eran abandonadas, por miedo, todas las ciudades del contorno. Arrastrando un ejército cuya marcha era ya pesada debido al botín hecho en ellas, y cubriendo en todo el día una etapa de apenas cinco millas, llega hasta la que llamaban Beudos la Vieja. Después acampa en Anabura, al día siguiente en las fuentes del Alandro, y al tercero en Abasio. Allí mantiene un campamento fijo durante bastantes días, porque habían llegado a la frontera de los tolostobogios.


-Llegados a este punto de la marcha, los romanos acaban de entrar en las fronteras de Galacia. Según Livio:

"Al fin, como había tres tribus, tolostobogios, trocmos y tectosagos, divíderon Asia en tres zonas, que serían tributarias cada una de una tribu. A los trocmos les fue asignada la costa del Helesponto, a los tolostobogios les tocó la Eólide y Jónia, y a los tectosagos el Asia del interior. Cobraban tributo en toda el Asia de este lado del Tauro, pero fijaron su sede en las proximidades del río Halis. Y era tal el terror que inspiraba su nombre, pues además, al ser tan prolíficos, su número iba en aumento, que al final ni siquiera los reyes de Siria se negaron a pagar tributo" XXXVIII 11-13

El cónsul reúne a sus hombres en asamblea y tras decidir los movimientos que se iban a realizar envía emisarios a Eposognato, el único de los régulos que había mantenido la amistad con Éumenes y negado ayuda a Antíoco contra los romanos. Levanta el campamento y, al segundo día de marcha, llegan emisarios de los oroandenses (habitaban al este del lago Caralitis) a pedir amistad; se les exigen 200 talentos, y cuando solicitan volver a dar cuenta a su patria se les concede esa posibilidad. A los dos días vuelven los que habían sido enviados ante Eposognato junto a unos embajadores del régulo los cuales solicitan que se les permita convencer a los tectósagos para que no entren en guerra con los romanos.

Cuando el cónsul acampa al suroeste de Pesinunte se da el primer ataque gálata; un número considerable de jinetes asalta por sorpresa los puestos de guardia. Tras un breve combate, la caballería romana logra repeler el ataque.

A partir de aquí, Manlio Vulso, como veía que había entrado ya en contacto con el enemigo, avanza después de un reconocimiento del terreno y cerrando cuidadosamente la columna.

Imagen Imagen

Ahora que los romanos se encuentran al sur de Pesinunte, como curiosidad mencionar que anteriormente ya se había tenido contacto con esta ciudad:

Il culto di Cibele, la Magna Mater dei Romani, fu introdotto a Roma il 4 aprile 204 a.C., quando la pietra nera, di forma conica simbolo della dea, vi fu trasferita da Pessinunte per scongiurare il pericolo di Annibale, secondo un consiglio che i sacerdoti avevano tratto dai Libri Sibillini

http://it.wikipedia.org/wiki/Magna_Mater
http://it.wikipedia.org/wiki/Pessinunte

En castellano es llamada Pesino:

http://es.wikipedia.org/wiki/Pesino


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El cónsul llega al río Sangarius y ordena la construcción de un puente. Una vez vadeado el río llegan ante él desde Pesinunte sacerdotes de la Magna Mater (veáse el enlace del post anterior) anunciando con un canto frenético que la diosa abría a los romanos el camino de la guerra y les concedía la victoria y el dominio de aquella región. Manlio Vulso acepta el augurio y acampa en las cercanías de Pesinunte. Al día siguiente se dirige hacia Gordio (antigua capital de Frigia), encontrando la ciudad totalmente abandonada pero repleta de provisiones. Allí le alcanzan los emisarios de Eposognato y le anuncian que el intento de mediación con los regulos de los demás pueblos ha resultado inútil. Le informan que éstos estaban emigrando en masa de las aldeas y las tierras del llano con sus mujeres e hijos llevándose cuanto podían acarrear, y se dirigían al monte Olimpo para defenderse allí con las armas y la posición.

Posteriormente unos mensajeros de los oroandenses informan con más precisión al cónsul; los tectosagos se habían separado dirigiéndose a otro monte, llamado Magaba, los trocmos, dejando sus mujeres e hijos con los tectosagos, habían decidido marchar, armados, a prestar ayuda a los tolostobogios en el monte Olimpo.


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Batalla del Monte Olimpo

"Los régulos de las tres tribus eran entonces Ortiagón, Combolomaro y Gauloto. Al emprender la guerra se habían basado sobre todo en el convencimiento de que, ocupando los montes más altos de aquella región y concentrando allí lo que pudiera bastar para las necesidades de un período de tiempo incluso largo, cansarían al enemigo por aburrimiento, pues éste no se atrevería a subir por unos parajes tan difíciles y accidentados, y en el caso de que lo intentase, incluso con una pequeña tropa se podía mantenerlo a raya y rechazarlo; y si se quedaba quieto al pie de aquellas montañas heladas, no soportaría el frío y las privaciones. Sin embargo, a pesar de que les servía de protección la altitud misma de la posición, rodearon además con una trinchera y otros elementos defensivos las cimas en las que se habían establecido. Apenas se preocuparon de aprovisionarse de armas arrojadizas, convencidos de que la propia naturaleza rocosa del lugar les proporcionaría piedras suficientes"

AUC, XXXVIII, 19, 2-6



Imagen Imagen

Manlio Vulso había previsto una batalla a distancia, asediando posiciones, por lo que había preparado gran cantidad de jabalinas, lanzas para los velites, flechas, bolas y pequeñas piedras para lanzar con honda. Provisto de esta reserva de proyectiles marcha en dirección a las tropas enemigas y acampa a cinco millas del Monte Olimpo.

Al día siguiente, Átalo y 400 jinetes se adelantan para examinar la configuración de la montaña y el emplazamiento del campamento gálata. Cerca de 800 jinetes lo interceptan y le obligan a emprender la huida.

Al tercer día, el cónsul parte con las tropas para reconocer el terreno y, al no salirle el enemigo al encuentro, logra dar la vuelta a la montaña sin problemas. Observa que por la cara sur las elevaciones era de tierra y con una pendiente suave hasta un determinado límite; por la parte norte las paredes rocosas eran casi verticales; pero mientras que todo el resto era impracticable, había tres caminos, uno en medio del monte donde el suelo era de tierra, los otros dos, más difíciles, estaban en la parte sudeste y noroeste.

Reconocida la zona, el cónsul traslada el campamento a las faldas del monte. Al día siguiente, después de obtener presagios favorables, divide el ejército en tres columnas e inicia el avance contra el enemigo.


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El cónsul, junto al grueso del ejército, se dirige hacia el acceso más fácil; ordena a su hermano Lucio Manlio subir por la cara sudeste hasta donde se lo permitiera el terreno y que, una vez alcanzado ese punto, gire en dirección a él y se reúna con su columna. A Caio Helvio le ordena que bordee el monte hasta la pendiente noroeste. Los auxiliares traídos por Átalo también son divididos en tres partes. La caballería y los elefantes permanecerían en la llanura más próxima teniendo sus oficiales la orden de estar atentos a los tres puntos de asalto para poder acudir como ayuda si la situación lo requería.


Los gálatas, confiados que su posición era inaccesible por las caras sudeste y noroeste, envían unos 4.000 hombres para ocupar una colina que dominaba el camino de tierra a menos de una milla del campamento con la intención de bloquearle el paso al cónsul. Al observar este movimiento, Manlio Vulso se prepara para la batalla.

En vanguardia iban los velites y los arqueros cretenses de Átalo junto a los honderos trales y tracios.

Se inicia el combate a distancia con las armas arrojadizas, equilibrado al principio, favorecidos los gálatas por la ventaja de la posición y los romanos por la variedad y la abundancia de armas ofensivas.


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Los gálatas llevaban escudos largos y planos pero demasiado estrechos lo que provocaba una mala protección ante la lluvia de proyectiles. Lanzadas todas las armas arrojadizas únicamente les quedaban las espadas, inútiles para aquel tipo de combate, por lo que recurren a arrojar piedras de tamaño inapropiado al no haber hecho acopio de las adecuadas para un enfrentamiento a larga distancia. Mientras tanto, son acribillados por los romanos desde todas partes con bolas, jabalinas y flechas.

Pillados por sorpresa para un enfrentamiento al que no estaban preparados llegan a un punto de rabia y desconcierto:

"Pues mientras que en el cuerpo a cuerpo, donde se pueden recibir e infligir heridas alternativamente, la rabia enciende su combatividad, por el contrario, cuando son heridos con armas arrojadizas ligeras desde un lugar lejano y oculto y no saben adonde dirigir su ciega embestida, se precipitan sin darse cuenta sobre los suyos como fieras heridas. El hecho de combatir desnudos dejaba a la vista sus heridas, y sus cuerpos son blandos y pálidos porque sólo se descubren durante la batalla, de modo que fluía más sangre dada su abundante carnosidad, se abrían heridas más repugnantes, y la blancura de sus cuerpos contrastaba más con el color oscuro de las manchas de sangre. Pero a ellos no los impresionan las heridas tan abiertas; a veces hasta creen que combaten más gloriosamente con cortes en la piel, cuando la herida es más ancha que profunda; pero cuando la punta de una flecha o una bola de honda penetra a fondo y les resquema con una herida aparentemente ligera, y el proyectil no sale cuando buscan la forma de sacarlo, entonces se tiran por tierra abandonándose a la rabia y la vergüenza de que acabe con ellos una herida tan pequeña"

Cuando los primeros gálatas logran aproximarse a las primeras filas romanas son degollados por los velites. Diezmados y superados en número, ante la proximidad de las enseñas de las legiones, huyen en desbandada hacia su campamento en donde ya cundía el pánico y el desconcierto lógicos al estar allí entremezclados las mujeres, los niños y la masa restante de los no combatientes.

Manlio Vulso, cuando las primeras enseñas llegan hasta las alturas ocupadas por la infantería ligera, da orden a los soldados de tomar un respiro y descansar un poco.

Aproximadamente en ese mismo momento, Lucio Manlio y Caio Helvio habían llegado hasta donde les permitía el terreno; al alcanzar las paredes impracticables giran en dirección a la columna del cónsul.


Imagen
Gálata moribundo, copia romana en mármol de una obra helenística del siglo III a.C., Museos Capitolinos, Roma


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Lógicamente, no había podido ver hasta ahora este estupendo hilo... :asombro3: Por lo que parece, VM decidió empezar a trabajar hace apenas 1 año... :cool2: Algo tarde, me temo. Para cotizar lo suficiente, me refiero... :green:

Saludos cordiales
Última edición por neride el 12 Ene 2014, 10:22, editado 1 vez en total.


"Cuanto es más eficaz mandar con el ejemplo que con mandatos; más quiere el soldado llevar los ojos en las espaldas de su capitán, que traer los ojos de su capitán a sus espaldas. Lo que se manda se oye, lo que se ve se imita. Quien ordena lo que no hace, deshace lo que ordena".
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Repetido


"Cuanto es más eficaz mandar con el ejemplo que con mandatos; más quiere el soldado llevar los ojos en las espaldas de su capitán, que traer los ojos de su capitán a sus espaldas. Lo que se manda se oye, lo que se ve se imita. Quien ordena lo que no hace, deshace lo que ordena".
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Mensaje por de guiner »

¿Trabajar?, Dios me libre, caballero. :shoked:

Se agradece tener audiencia tan honorable; con VM ya tengo a cuatro cofrades. Imagen

Ya sabe, si quiere preguntar algo, aportar o dar tabaco, aquí me tiene usía.

Un saludo cordial.


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Mensaje por emanuel »

Aqui esta tambien usia,pa lo del tabaco :fuma:que en mis ratos libres le pego al cigarrillo a todo gas. :green:
Lo de trabajar lo dejaremos para la proxima legislatura... :risa2:

salve Valerios.


Shema Israel...
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Mensaje por neride »

Valerio escribió:Se agradece tener audiencia tan honorable; con VM ya tengo a cuatro cofrades.


Servidor ha contado más de cuatro y, a excepción de este servidor, la inmensa mayoría son foristas de pedigrí... :cool2:

Valerio escribió:Ya sabe, si quiere preguntar algo, aportar o dar tabaco, aquí me tiene usía.


Necesito algo de tiempo, caballero. Roma no se hizo en un día... :lee2:

En fin, voy a empezar cuanto antes a empaparme del tema. Hoy toca sesión doble de péplum... :green:

Saludos


"Cuanto es más eficaz mandar con el ejemplo que con mandatos; más quiere el soldado llevar los ojos en las espaldas de su capitán, que traer los ojos de su capitán a sus espaldas. Lo que se manda se oye, lo que se ve se imita. Quien ordena lo que no hace, deshace lo que ordena".
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Continuando.

Los soldados de las legiones reciben la orden de recoger todas las armas arrojadizas que habían quedado diseminadas en la pequeña colina mientras que la infantería ligera se adelanta junto a las tropas auxiliares.
El cónsul se pone en marcha hacia el campamento gálata. Cuando se aproxima deja a los velites y tropas auxiliares en vanguardia, visto las características y el resultado favorable del primer encuentro.

Los gálatas, temiendo que sus fortificaciones fueran insuficientes, forman con sus armas delante de la empalizada. De repente se ven sometidos a una nube de proyectiles que les hace refugiarse en el campamento, dejando únicamente fuertes guardias a la entrada misma de las puertas.
Sobre la masa empujada al interior del campamento se dispara una ingente cantidad de armas arrojadizas y proyectiles, y los gritos mezclados con los llantos de las mujeres y los niños dan a entender que eran muchos los heridos. Es entonces cuando avanzan las legiones; la vanguardia lanza sus jabalinas contra las tropas que bloqueaban las puertas, estos no logran aguantar mucho tiempo el empuje romano.

Abiertos los accesos al campamento, todos los que estaban en el interior del mismo salen huyendo en todas direcciones. Manlio Vulso ordena que se persiga a esa multitud, aterrorizada hasta tal punto que muchos caían despeñados por las paredes rocosas.

La segunda columna, al mando de Lucio Manlio, se aproxima al campamento pero el cónsul les niega la entrada para evitar que se dieran al saqueo y los manda directamente en persecución del enemigo. Caio Helvio llega tras la partida del cónsul y no es capaz de impedir que sus hombres tomen gran parte del botín.

No resultó fácil establecer el número de muertos debido a que la matanza se extendió por todos los vericuetos de los montes y gran parte de ellos rodaron por peñascales inaccesibles hasta valles muy profundos mientras que otros fueron muertos en la espesura de los bosques.

Claudio Cuadrigario (según relata Livio) sostiene que fueron cerca de 40.000 las víctimas.

"Valerio Anciate, que suele ser más exagerado abultando las cifras, que no pasaron de diez mil. El número de prisioneros llegó sin duda a los cuarenta mil, porque los galos habían arrastrado consigo una multitud de toda edad y condición como si se tratase de emigrar más que de ir a una guerra"


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Mensaje por Arkangelnllamas »

Valerio escribió:"Valerio Anciate, que suele ser más exagerado abultando las cifras, que no pasaron de diez mil. El número de prisioneros llegó sin duda a los cuarenta mil, porque los galos habían arrastrado consigo una multitud de toda edad y condición como si se tratase de emigrar más que de ir a una guerra"


la verdad leyendo todo esto da la impresion de que los galatas lo ultimo que querian era combatir y si se subieron a esa posicion fue por puro miedo... viendo entre lineas parece mas una masacre de soldados a granjeros que una batalla propiamente dicha

¿tal era la mala fama del general romano que se llevaron hasta sus crios alla?


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Mensaje por de guiner »

No, el cónsul Manlio Vulso no es que tuviera mala fama. Ya habrás visto que por donde ha pasado, mientras le pagaran lo que pedía, ha dejado tranquilos a todos. El motivo de la estrategia gálata ya lo puse con las palabras de Livio:

"Al emprender la guerra se habían basado sobre todo en el convencimiento de que, ocupando los montes más altos de aquella región y concentrando allí lo que pudiera bastar para las necesidades de un período de tiempo incluso largo, cansarían al enemigo por aburrimiento, pues éste no se atrevería a subir por unos parajes tan difíciles y accidentados, y en el caso de que lo intentase, incluso con una pequeña tropa se podía mantenerlo a raya y rechazarlo; y si se quedaba quieto al pie de aquellas montañas heladas, no soportaría el frío y las privaciones"

Esta gente no podía hacer frente a los romanos en una batalla campal ni resistir el asedio de sus ciudades. Por otro lado, hay que tener en cuenta que Livio en ningún momento menciona la palabra "gálata", para él son "galos" (yo pongo el nombre con el que se les conoce). Ya puse el enlace sobre estas tres tribus de galos que se separaron del resto hacia el siglo III aC.

http://es.wikipedia.org/wiki/G%C3%A1latas

Otro enlace podría ser éste:

Las tribus galas, al quedarse sin su caudillo, se dispersaron. Los tolistobogii, los trocmi y parte de los volcas y tectósages fueron los que cruzaron el Helesponto (mar Negro) y pasaron a Asia Menor. Allí (después de algunos enfrentamientos con los reyes de Pérgamo) se asentaron en una región al sur del Ponto, que pasó a llamarse Galacia, y sus habitantes se llamaron galos o gálatas. La otra parte de los volcos y tectosagos regresaron a su lugar de origen, en el suroeste de la Galia, en la región de Tolosa (la actual Toulouse). Este grupo llevaba consigo el botín de la campaña llevada a cabo por su rey Breno

http://es.wikipedia.org/wiki/Breno_(siglo_III_a._C.)

Estas tribus son galos y combaten como tales, como ya se ha visto. Piensa que se asentaron en la zona un siglo antes de los hechos que se están tratando.

En incursiones anteriores y posteriores de tribus celtas en diversas partes de Europa, se puede ver que esta gente se llevaba la casa a cuestas; en esta expedición punitiva ellos son los atacados.

Ejemplos pasados y futuros (con respecto al año 189, que es cuando se dan estos sucesos) los hay y muchos, no sólo protagonizados por los galos, de grupos que toman un punto fuerte y se llevan a toda la familia; bueno alguno se olvidaría a la suegra.

da la impresion de que los galatas lo ultimo que querian era combatir y si se subieron a esa posicion fue por puro miedo...


No es que no quisieran, es que no podían.

viendo entre lineas parece mas una masacre de soldados a granjeros que una batalla propiamente dicha


La estrategia del cónsul está clara; mantiene un primer combate a distancia empleando a los velites y a la infantería auxiliar. Los gálatas, una vez que han arrojado todo lo que tenían, se retiran al campamento y esperan a los romanos. Manlio Vulso, únicamente continúa con la táctica del primer enfrentamiento, por eso pone a todos los legionarios a recoger los proyectiles para reponer a las tropas ligeras, a las que sigue manteniendo en la vanguardia. Prácticamente son estos últimos los que actúan todo el tiempo y deciden la batalla.


No se si me he explicado. :conf:


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