Nuevamente. En la guerra de independencia, los realistas combatían por su patria revindicando la unidad de la nación, España, que era hasta la guerra la nación de todos los españoles, peninsulares y americanos. Los insurgentes combatían por su patria proclamando la independencia frente a la nación española. Ambos combatían por su patria, pero el bando que enarbolaba el lugar de nacimiento como causa política se llamaba a sí mismo patriota, mientras que el que enfatizaba la unidad de costumbres, lengua, religión y fidelidad a la Corona se llamaba a sí mismo realista.
Por cierto, a mí no me parece malo que los patriotas de Cajamarca reivindiquen su autonomía frente a la desastrosa gestión del gubernamental Toledo.
Según tú, si unos peruanos inician una guerra civil, la ganan y fundan un país distinto de Perú ¿que serían? ¿patriotas o traidores?
Nuevamente. Patriota es antónimo de forastero. Cuando los patriotas se levantan contra el dominio de la Península, no están traicionando el sentido de pertenencia que tienen con sus progenitores (los padres de la patria) ni con el patrimonio y la tierra (la madre patria o, como decimos en quechua, la pachamama), por lo que no traicionan a la patria en ningún momento. Lo que no puede decirse de algunos peninsulares que en su propia tierra entraron en guerra civil.
El ejemplo de Cajamarca no viene al cuento porque los cajamarquinos no ponen en tela de juicio su nacionalidad peruana. Pero, si lo hicieran, obviamente me parecería lógico que llamasen a su grupo Movimiento Patriótico Cajamarquino o algo así, mientras que la capital invocaría en reacción el nacionalismo.
Saludos,
Lavoe