El 11 de julio Luis XVI llama a Louis Auguste Le Tonnelier de Breteuil y destituye a Jacques Necker por su "extremada condescendencia" con los Estados Generales.
Louis Auguste Le Tonnelier de BreteuilNecker se retira discretamente a Bruselas pero inexplicablemente encarna las esperanzas de los comerciantes de París.
Mientras, el precio del pan sigue subiendo.
Las tropas del barón Pierre Victor de Besenval de Brünstatt transforman el Champ-de-Mars en campo de maniobras y apilan pólvora en la Bastilla, considerada inexpugnable.
El pueblo tiene miedo y reacciona de forma defensiva.
Llegan más tropas alemanas, los regimientos de infantería de Nassau y Bouillon, de Metz, los dragones del Delfín, la infantería pesada, la infantería de Provenza, los húsares de Lauzun, un destacamento de artillería de Toul.
Lucie Simplice Camille Benoît Desmoulins llama al pueblo de París a la defensa.
El librero Desenne publica infatigablemente folletos contra el absolutismo y la monarquía.
Muchos soldados empiezan a desertar y se unen al pueblo pero las armas que aportan no son suficientes.
El 12 de julio, la noticia de la destitución de Jacques Necker crea un clima de pánico financiero en las clases burguesas y de insurrección en las clases populares.
El
"Régiment Royal-Allemand Cavalerie" que trata de restablecer el orden en las Tullerías y en la Plaza Vendôme se ve enfrentado contra la multitud y los guardias franceses que se posicionan con el pueblo.
El día 13 todas las parroquias tocan arrebato.
La Plaza de Grève es ocupada; la oficina de contribución municipal es incendiada; el convento de Saint-Lazare es saqueado.
No obstante, los diputados de la Asamblea siguen celebrando sesión para que el rey retire las tropas.
Un saludo, ciudadanos.
