La 2ª Batalla del Pacífico

[flanker33]

Las relaciones chino-soviéticas se ven todabía más empañadas por sendos incidentes.

Artillería pesada soviética disparando contra posiciones chinas al otro lado de la frontera:



Petrolero chino ardiendo en el estrecho de Luzón:



Los japoneses se lanzan en solitario a recuperar las Kuriles.

Paracaidistas japoneses saltan sobre Shikotan:



Saludos.

[flanker33]

Lo que puede llevar a una rápida conclusión...
Vamos que le queda un par de telediarios al relato

Saludos.

[flanker33]

29 y 30 de octubre

-Si bien la ocupación de las islas Habomai no supuso ningún problema para las tropas japonesas, los paracaidistas se toparon con dificultades casi desde el principio en la isla de Shikotan. Esta era un trozo de roca volcánica de unos 26 km de largo por 12 km en su parte más ancha, y sus dos pequeños núcleos de población se encontraba al norte y noroeste de la isla. El batallón motorizado soviético fue enviado desde aquella zona hacia el sur, donde cercanos a una pequeña bahía estaban descendiendo los japoneses. Estos pasaron momentos muy difíciles en las primeras horas de la “recuperación” de la isla, ya que con un número equivalente de soldados, los rusos tenían vehículos blindados y morteros de apoyo, mientras que los paracaidistas confiaban en sus ametralladoras y algunos lanzagranadas para contenerlos hasta que comenzaron a llegar sus camaradas de la 5º División en buques rápidos, y desde lanchas neumáticas y helicópteros comenzaron a reforzar a los paracaidistas. Pero fueron los cazabombarderos F-1 y algunos helicópteros Cobra, que operando desde el extremo de Hokkaido, lograron salvar la situación con sus ataques a las tropas rusas. Cuando el lanzamiento de unos 1.500 paracaidistas estuvo completado, apoyado por unos 500 soldados llegados por vía marítima, pudieron hacer retroceder a los soviéticos, y al anochecer, estos se encontraban defendiendo la pequeña población de Malokurilskoye, donde parte de la población y algunos heridos eran evacuados hacia Iturup en pequeños pesqueros. Cuando terminaba el día, y pese a que todavía quedaba un pequeño foco de resistencia, la isla de Shikotan había pasado a manos Japonesas.

-En Corea del Sur, en las inmediaciones de Pohang, la situación continuaba evolucionando. El general soviético al mando del 5º E. de Armas Combinadas había dado una serie de ordenes para que por la mañana, unos 60 tanques de la 194º D. Mecanizada que no eran demasiada utilidad en el combate urbano en Pohang, más otro medio centenar de T-55 de la 17º D. Mecanizada que cubría sus flancos y retaguardia, fuera puestos a disposición de la 5º D. de Tanques para reemprender el ataque y lograr la ruptura definitiva. Además varios tanques dañados que habían sido reparados en los talleres de las posiciones retrasadas debían ser destinados también al ataque. También desde algo más al norte, debía llegar una división de infantería norcoreana de reserva, que aunque pobremente equipada e instruida, debería servir como “carne de cañón” en un nuevo intento de forzar el río Hyeongsan y tomar el sur de Pohang.

Pero entonces el ataque químico sobre la retaguardia de su Ejército complicó enormemente las cosas. La situación se tornó en un caos, y los tanques que debían llegar desde la retaguardia no lo hicieron hasta la tarde, y los suministros y la infantería norcoreana, hasta el anochecer. Aún así, los soviéticos intentaron un nuevo ataque contra los surcoreanos, aunque con algo de retraso, ya que no comenzó hasta las 11 de la mañana, y con cierta preocupación por el estado de sus suministros, ya que muchos de los tanque y vehículos blindados apenas llevaban dos tercios de la munición ordinaria y el estado de abastecimiento de combustible no era mucho mejor.

Por su parte, los aliados no se habían quedado quietos, y tras establecer una línea defensiva conjunta la 72ª división surcoreana (o lo que quedaba de ella tras los combates del día anterior) y la 3ª división japonesa, con la llegada de la 4ª japonesa, y su desmembración en brigadas, se había podido establecer nuevas posiciones. Una brigada fue enviada al sur del río Hyeongsan para apoyar a los norteamericanos, mientras que otra era puesta en el flanco de todo el conjunto de las fuerzas, para ayudar a detener un posible ataque de la división soviética que guardaba el flanco enemigo, y la última brigada con los elementos de apoyo de la división, tras los surcoreanos y sus compañeros de la 3ª, a modo de reserva.

Muchos de los cazas aliados cazas fueron enviados a proteger Seúl para que no se produjeran nuevos ataques aéreos químicos, lo que dejó un tanto huérfanos a los aviones de ataque, de los cuales, algunos también habían marchado para detener una posible ofensiva norcoreana contra la capital para aprovechar su cobarde ataque del día anterior. Pero de todas formas, los cazas soviéticos habían dado lo mejor de si el día anterior y el día 30 apenas se les vio por los cielos surcoreanos. La aviación aliada tampoco estaba en muy buen estado. El esfuerzo del día 29 había dejado a muchos “pajaros” abatidos y bastantes tocados con necesidad de reparaciones, a pilotos agotados y algunos heridos. En general los aliados debían esperar menos apoyo que el día anterior, y tan solo la llegada de un escuadrón de Harriers procedentes del convoy que transportaba al resto de la 1ª D. de Marines que no se había desviado hacia Adak, y que estaba cercano a su destino en Corea, y los A-7 que habían atacado Adak y que hacía 48 horas habían sido reclamados por el general Sharp, supuso un alivio para las fuerzas aéreas aliadas en aquella jornada.

EL primer ataque lo realizó la 194º al intentar, sin demasiado entusiasmo, forzar de nuevo el río aunque no hubiesen llegado los norcoreanos. El resultado no varió demasiado con respecto al día anterior. Varias docenas de soldados y unos pocos vehículos lograban llegar a la orilla contraria, solo para ser repelidos y devueltos al río poco después al contraatacar los americanos. Para ambos bandos pronto estuvo claro que mientras que no hubiese ningún factor nuevo, la lucha en aquel sector estaba paralizada. Por el contrario, el ataque de la división de tanques soviética, buscaba un impacto decisivo en la batalla. Con los tanques de la división mecanizada bajo sus ordenes, el comandante de la 5ª D. de tanques ordenó de nuevo un avance sobre las posiciones enemigas. Desde el principio la lucha fue encarnizada. Los aliados sabían que no podían retroceder mucho más sin ser desbordados, así que se aferraron al terreno y confiaron en sus misiles CC, pero cada vez eran más los encuentros entre los “monstruos de acero” y los infantes equipados con lanzagranadas que disparaban a corta distancia sobre las zonas más vulnerables de estos. Este combate “cuerpo a cuerpo” elevó las bajas en ambos bandos, pero la peor parte se la llevaba la infantería aliada. Los japoneses pagaban un caro tributo por su inexperiencia en combate, pero mostraban determinación y estaban resueltos a no ceder terreno.
Sobre las 2 de la tarde los rusos se encontraban en posición de lograr una ruptura, pero Sharp había llamado a las dos brigadas japonesas de la 4ª división que se encontraban en el sector, y volcó todo su poder artillero y aéreo contra la punta de lanza blindada. La situación se mantuvo en un tira y afloja hasta media tarde, cuando el ataque comenzó a flaquear, regresando finalmente los soviéticos a sus posiciones de donde habían partido por la mañana. El general del 5º Ejército maldijo la situación en su retaguardia y a los americanos por atacar con armas químicas, lo que había llevado a sus tropas a actuar como si otro ataque químico fuera en cualquier momento y entorpecía y ralentizaba los movimientos de sus tropas. Si hubiese tenido al comienzo del ataque los tanques que esperaba, ahora estaría avanzando hacia el sur, o si hubieran llegado las divisiones prometidas, y que se encontraban retenidas por la situación con China, y no se hubiera retirado a sus mejores aviones para defender la Madre Patria, el resultado habría sido muy diferente. Ahora, y según le informaba inteligencia del Teatro de Operaciones, una o dos divisiones americanas, con armamento pesado y tanques estaban a punto de llegar a Corea. Entonces las cosas se pondrían más difíciles para sus hombres.

-En Seúl, los norcoreanos habían lanzado un ataque contra las posiciones aliadas al sur de la capital, pero las mejores tropas de estos habían sido “gaseadas” durante la noche, y si bien estaban preparadas, las bajas habían sido inevitables. Aunque en teoría estaban preparadas para combatir en un ambiente contaminado, la realidad es que los movimientos y el combate en ese ambiente era extremadamente complejo y lento.
El ataque evolucionó bien durante un rato, pero luego los aviones enemigos se cebaron sobre sus puntas de ataque, a la vez que soldados aliados de otros puntos eran enviados a reforzar las defensas. En un momento dado, el ataque se detuvo al ver como caían grandes cantidades de proyectiles que dejaban una gran cantidad de humo, y que los ahora nerviosos soldados creyeron que era un nuevo ataque con agentes químicos. El mando del ataque exigió un contraataque con el mismo método contra los imperialistas, pero antes se le exigió que confirmara el agente con el que eran atacados. Al descubrir que tan solo eran proyectiles fumígenos, a parte del ridículo ante sus superiores, había dejado pasar el momento crítico para conseguir un avance importante y el ataque fue perdiendo ímpetu hasta quedar detenido a pocos kilómetros de su línea de partida.
El general fue enviado a un campo de reeducación y ejecutado por actividades antirrevolucionarias cuatro días después.

[flanker33]

29 y 30 de octubre

-La crisis entre la URSS y China tuvo su punto álgido ese mismo día. Los soviéticos, al final decidieron que no era “del interés del pueblo ni de su Ejército” la confrontación con China, y que ya habría otro momento para ajustar las cuentas con aquellos traidores. A mediodía, los primeros ministros chino y soviético mantuvieron una conversación a petición de este último, en la que los rusos se comprometían a no atacar más buques con destino a China, y que fueran notificados a las autoridades militares soviéticas por estos.
Así mismo, se comprometieron a entablar negociaciones sobre sus disputas fronterizas en un plazo de 6 meses desde el final del conflicto con los imperialistas.
Los chinos por su parte, y jugando bien sus cartas, mantuvieron una calculada ambigüedad sobre lo acordado en la reunión, aceptando en principio los acuerdos, pero manteniendo que debían consultar a sus órganos de decisión antes de llegar a un acuerdo total, que incluiría una retirada de las tropas a ambos lados de la frontera no menor de 30 kilómetros.
Pekín había recibido otra comunicación horas antes desde Washington, desde donde se les animaba a mantener la situación actual, para propiciar que las fuerzas soviéticas se mantuvieran a la expectativa dentro de sus fronteras ante un posible conflicto chino-soviético. A cambio, prometían olvidar lo ocurrido en Tiananmen unos meses antes, y volver a una política de incipiente cooperación económica y tecnológica con China, nada más terminar la guerra contra los comunistas de Moscú. Y si llegado el caso, los combates prendían en la frontera con la URSS, China sería considerada una aliada de EEUU en la guerra contra la URSS.

El Politburó chino se encontraba ahora con dos opciones, o mantener la situación actual con riesgo de entrar en guerra con una potencia nuclear y convencional como la Unión Soviética (aunque comenzaba a dar signos de debilidad en algunos frentes), y tener una recompensa a largo plazo si todo salía bien para los americanos, o aceptar la solución rusa, rebajar tensiones y volver a la situación de neutralidad, en la que tanto si la guerra era ganada por unos u otros, su recompensa sería mínima, pero el riesgo de una guerra para ellos desaparecía. Aquella decisión se tomaría al día siguiente en una reunión de urgencia del Politburó del Partido Comunista Chino.

-También el día 30 vio como el mítico “teléfono rojo” era utilizado por primera vez en aquél conflicto. Moscú advirtió que otro ataque con armas de destrucción masiva contra sus tropas sería el inicio de una escalada nuclear, mientras que Washington respondió acusando a Moscú de atacar primero, y a su vez amenazó con utilizar armas atómicas si eran de nuevo objeto de ataques químicos o de cualquier otro tipo de armas estratégicas.

En una reunión a última hora de la noche, los miembros clave del gobierno y el Ejército soviético se reunieron para intentar encontrar una solución a aquella escalada verbal y de uso de armas “especiales”. Preocupados por la perdida de un número importante de sus submarinos con cohetes nucleares y la destrucción de su radar de largo alcance de Pechora, dudaban entre si el hueco abierto en la cobertura radar de los americanos al norte de su país era suficiente para equilibrar la situación, o en caso de llegar a un conflicto nuclear, podrían perderlo por aquellos motivos.
Preocupados también por como evolucionaba la situación en el Atlántico y en menor medida en el Pacífico, y el estancamiento en Alemania y Corea (aunque en Europa esperaban que fuera solo temporal y reanudar de nuevo las acciones ofensivas en unos días), algunos miembros se preguntaron si no era la hora de entablar negociaciones de paz ahora que poseían bazas para obtener buenas concesiones de sus enemigos. En principio aquello no gustó a los militares, pero varios políticos vieron la lógica de intentar obtener ventajas en unas negociaciones antes que arriesgarse a una hecatombe nuclear mundial. La reunión acabo sin acuerdo, que se tomaría el día siguiente en una nueva reunión tras conocer la postura definitiva de China.

En Washington, se produjo otra reunión del Consejo de Seguridad Nacional, donde el tema monográfico fue el uso de armas químicas y la implicación en la guerra. Nadie creía que aquel ataque hubiese sido autorizado sin el conocimiento y la aprobación de Moscú, y por tanto, pensaban que era una apuesta de los comunistas para saber como reaccionaba occidente ante tal hecho. Todos estuvieron de acuerdo en mantenerse firmes, pero algunos pensaban que quizás se había presionado demasiado a los rusos con la eliminación de sus submarinos balísticos, y que estos se hallaban ahora en la encrucijada de escalar la guerra antes de perder casi totalmente uno de los pilares de su triada nuclear. Se barajó la posibilidad de suspender la campaña anti-SSBN y hacérselo saber a los soviéticos. Al final se aprobó por un estrecho margen esa propuesta, con algunas modificaciones, que sería trasladada a los rusos al día siguiente.

[Urbano Calleja]

Espectacular flanker... ya no me quedan uñas!

[flanker33]

Espectacular flanker... ya no me quedan uñas!

...gracias, aunque he de decir que quería tener un rato para terminarlo, pero durante un tiempo lo voy a tener un poco complicado, por lo que seguramente, si no encuentro un huequecillo, la resolución vendrá dentro de unas semanas...y que conste que no tengo nada en contra de tus uñas

Saludos.

[Urbano Calleja]

Deja, deja... que asi pegan un estironcillo :)

[toletum]

Gracias a flanker y sergiopol por los dos relatos estupendos.
Me encanta el tema de la guerra fría y la tercera guerra mundial.
No estaría de más abrir un hilo sobre el tema pero en el sur de Europa y el Mediterraneo. Además, aquí, hay una zona, que es Italia, dónde no he encontrado información, como tampoco de Grecia y Turquía, dónde creo que se dan distintas posibilidades.
La caida tanto de Turquía como de Grecia en un ataque limitado del Pacto de Varsovia daría a la Urss una ventana en el Mediterraneo y el control de la parte Oriental así como del acceso al Mar Negro e influencia en el canal de Suez.
En el caso de Grecia ocurriría lo mismo sólo que quizás peor, ya que estarí situado más en la zona central y cerca de Italia, controlando la zona oriental e intirfiriendo en el Mediterraneo Central.

Aunque laposibilidad más peligrosa e inquientante, sería la caida de Italia.
Un ataque limitado en la zona Norte de la peninsula pondría en peligro todo el país e incluso permitiría un flanqueo hasta el sur de Francia, poniendo en peligro toda la retaguardía de la Nato y en el mejor de los casos, la caída de Italía, con lo que dominaría todo el Mediterráneo y de Facto lo partíria en dos , dada la situación de la península.

Gracias por la atención.

[flanker33]

Hola Toletum,

Gracias a ti por leerlo y escribir tu primer mensaje en este hilo.

No estaría de más abrir un hilo sobre el tema pero en el sur de Europa y el Mediterraneo

Estaría bien, aunque supongo que ya se habrá tratado en el tema de la OTAN vs Pacto de Varsovia en el subforo de conflictos modernos.

Sobre el ataque a Italia, y teniendo en cuenta que no tienen frontera común, haría falta saber algunas cosas:

-¿Atacaría el PacVar Austria?
-¿Permitiría Yugoslavia el paso de las tropas del PacVar por su territorio para atacar Italia? ¿Se uniría Yugoslavia al ataque?

En el gancho de izquierda que comentas sobre el norte de Italia para llegar a Fracia, lo veo complicado, a parte de las variables antes expuestas de la actitud Yugoslava y el ataque a Austria, el norte de Italia no es el mejor terreno para operaciones ofensivas mecanizadas, y el PacVar debería enviar tropas que deberían ser sacadas de otros teatros, mientras que la OTAN no tendría que retirar tropas, ya que el Ejército italiano se podría hacer cargo de la defensa y en caso de necesidad, podrían intervenir tropas francesas o españolas. En cualquier caso, aunque sería interesante para el PacVar si tuviera éxito, lo veo bastante complicado que llegara a tenerlo.

Sobre Grecia y Turquía, la situación de los miembros menores del PacVar tampoco era para tirar cohetes, Rumania era el aliado díscolo y no estaba claro que interviniera en una guerra contra occidente y Bulgaria era de los países militarmente más débiles del Pacto.
Para mi, una buena opción sería que las tropas soviéticas atacaran la parte europea de Turquía y conquistaran Estambul y una de las orillas que dan acceso al Mar Negro, impidiendo el acceso a dicho mar por parte de las marinas de guerra de la OTAN y especialmente la 6ª Flota a la vez que se llevan a cabo operaciones para dominar el Mar Negro y destruir las bases aéreas en Turquía que amenazaran el flanco sus de la URSS, en una operación más defensiva que ofensiva, ya que donde se decidiría el resultado final sería en el frente central, y un uso de recursos excesivo en frentes secundarios, podría ser contraproducente.
Respecto a Grecia, negociando la no implicación de esta en la guerra podría asegurarse una frontera segura y no malgastar recursos.

Así de forma rápida es mi opinión al respecto.

Y ahora un poco más que esto ya esta llegando a su fin.

[flanker33]

31 de octubre

-Con la llegada a la base aérea de Clark en Filipinas de 8 Hornets que la RAAF finalmente había liberado de la defensa de Australia, se estudió realizar un ataque conjunto entre australianos, neozelandeses, filipinos y norteamericanos contra los dos buques soviéticos que se refugiaban en Vietnam, pero al tener conocimiento de ello el nuevo CINCPAC, decidió cancelar por el momento la misión ya que creía más factible y menos costoso el hundir aquel crucero y el destructor en cuanto volvieran a salir a mar abierto y perdieran la cobertura aérea y las defensas antiaéreas terrestres que los protegían. Por si acaso el plan siguió sobre la mesa por era necesario recuperarlo en algún momento.

-En las Kuriles y el norte de Japón, la situación aumentaba en intensidad. Si bien la conquista de Shikotan había concluido, y las tropas paracaidistas estaban volviendo a sus bases temporales en Hokkaido mientras eran sustituidas por una brigada de la 5ª División, de madrugada, en el mar, los soviéticos habían lanzado un ataque con 3 patrulleras lanzamisiles contra uno de los pequeños convoyes que transportaba los refuerzos a la isla, resultando alcanzado uno de los pequeños mercantes y un destructor japonés, hundiéndose el primero, por la perdida de solo una de las lanchas soviéticas.
Pero no fue la última reacción rusa ya al despuntar el alba lanzaron un ataque con bombarderos sobre el norte de Hokkaido y Tokio.
Todo comenzó con un combate aéreo sobre el mar del Japón y Hokkaido entre MIG-23 y Su-15 rusos contra algunos F-15 y F-4 japoneses, lo que mantuvo ocupada a la defensa aérea lo suficiente como para que dos grupos de bombarderos realizasen sus misiones. Seis Backfire y seis Blinders tomaron rumbo a la capital. Un Tu-22 y otro Tu-22M fueron abatidos antes de lanzar sus misiles desde unas doscientas millas de distancia, por lo que al final fueron 15 los AS-4 que alcanzaron la capital nipona, produciendo varios incendios y que tres grandes columnas de humos se elevaran sobre los orgullosos rascacielos nipones, así como varias docenas de muertos y heridos.
Si bien los soviéticos se escudarían en decir que los proyectiles iban dirigidos hacia instalaciones militares de la ciudad, la realidad es que querían hacer ver a los japoneses que tanto su intervención en Corea como su ataque a las Kuriles traerían consecuencias para su país y su población, e intimidar a su gobierno para que adoptase un perfil más bajo en el conflicto y pensaban que quizás un ataque contra la población civil de la capital podría tener el efecto deseado.
El otro grupo de bombarderos, formado por 8 Tu-16 y una docena de Il-28 de la reserva de las fuerzas aéreas, atacaron posiciones en los puntos de reunión y de embarque de la 2º División de infantería al norte de Hokkaido y que era la designada para la operación contra Kunashir. Los atacantes perdieron casi la mitad de sus aparatos, pero el ataque produjo daños moderados en las instalaciones portuarias, en los suministros y tropas que esperaban embarcar, lo que produjo que la operación hubiera de posponerse. De todas formas, el mando militar japonés, tras las lecciones de la toma de Shikotan y la negativa norteamericana a desviar al menos uno de los regimientos de Marines que habían participado en la batalla de las Aleutianas hacia las Kuriles, hizo replantearse las siguientes fases de la toma de las demás islas japonesas en manos soviéticas, y retrasarlas por unos días al menos.

-En Adak, los Marines de la 1ª División que habían retomado la isla, ya estaban embarcados de nuevo en sus buques tras haber dejado la seguridad de la isla en manos de las tropas de la 6º División de Infantería Ligera, y se disponían a reemprender su interrumpido viaje hacia la península coreana, a la que llegarían dentro de unos seis días.
El viaje lo harían en compañía de los dos portaviones que habían apoyado la operación de Adak, principalmente para protegerlos en la zona más peligrosa al pasar a menos de mil millas de Petropavlosk, pero finalmente, y ya cuando la zona de defensa aérea de Japón se hiciera cargo de su protección, los grupos de los portaaviones se adelantarían a los anfibios para ayudar en la campaña coreana y del Lejano Oriente ruso.

-El nuevo comandante del ejército norcoreano había previsto una nueva ofensiva para el día 31 y que esperaba fuera la definitiva para acabar de vencer la feroz resistencia aliada, pero en la madrugada anterior, los soviéticos habían hablado con el Gran Lider, y le habían expuesto sus quejas a causa del ataque químico del día anterior, comunicándole que si no ponía a su mando militar bajo el mando soviético en el Lejano Oriente de inmediato y dejaban de tomar decisiones por su cuenta, retirarían su apoyo militar y logístico al régimen norcoreano. Kim Il Sung, viéndose acorralado y en una posición incomoda, decidió que la responsabilidad sobre el ataque químico debía recaer sobre quien lo propuso y no sobre quien lo ordenó, así que el nuevo general en jefe del Ejército norcoreano fue detenido y acusado de crímenes contra el estado. Enviado sin dilación a un campo de reeducación, su planeado ataque a Seúl se pospuso de manera inmediata e indefinida hasta que el mando soviético diera su aprobación. El desafortunado general no había durado ni 24 horas en su puesto.

Mientras, en el sector oriental de la península, los soviéticos se reagrupaban reforzándose con tanques y tropas norcoreanas. La 29ª División Mecanizada soviética que había participado en el cerco a Seúl, ahora estaba a menos de 24 horas para unirse al resto del 5º E. de Armas Combinadas. Pero no había resultado fácil, la noche anterior un nuevo ataque a los puentes sobre el río Tumen, en la frontera soviético-norcoreana, por parte de los tres F-117 que volaban en aquel teatro de operaciones, y de los cuales uno fue derribado por un Mig-31, consiguió la destrucción de dos de los cuatro puentes que ahora funcionaban sobre el río, dificultaba más el envió de suministros hacia el sur. En previsión de esos ataques y que el flujo de material y soldados se interrumpiera, la marina había comenzado a enviar suministros mediante convoyes navales desde Vladivostok hacia pequeños puertos costeros surcoreanos en la retaguardia del 5º Ejército. Durante la madrugada, un SSK japonés logró hundir un mercante antes de ser hundido el mismo por un Udaloy, mientras que al amanecer, otro intento por parte de algunos buques de superficie surcoreanos de entorpecer el transito, se vio frustrado por los escoltas del convoy.


Por su lado, los aliados no se habían quedado quietos, y aunque los japoneses se hacían los remolones a la hora de enviar las otras dos divisiones prometidas, como medio de presión para recibir el apoyo americano para la reconquista de las restantes isla Kuriles japonesas bajo ocupación rusa, un tercer regimiento de la 1ª de Marines y los batallones de tanques y vehículos blindados, así como parte de su artillería, ingenieros y Cuartel General desembarcaron en Pusán a lo largo de ese día y eran despachados al frente de Pohang a toda velocidad. Los próximos refuerzos previsto era la llegada de la 4ª División de Infantería Mecanizada norteamericana, que llegaría en 48 horas, y mientras tanto, una brigada de infantería colombiana llegaría vía aérea transportada por aviones de carga y pasajeros de varias fuerzas y líneas aéreas de Latinoamérica en las próximas horas, como continuación de su compromiso en la defensa de Corea del Sur, iniciado casi 40 años atrás.

Ese día sirvió para que los dos bandos intentaran recuperarse y reorganizarse tras dos días de salvaje lucha, pero ambos contendientes ya tenían previstos los planes para retomar el combate al día siguiente…

[flanker33]

-A primera hora, cuando todavía no había amanecido en Pekín, el Politburó chino se reunió de urgencia para tratar las distintas opciones que tenían sobre la mesa, pero que básicamente se resumían en dos: decantarse por la oferta soviética o por la norteamericana.
La “vieja guardia” no quería aceptar la propuesta de los capitalistas, ya que argumentaban que China se convertiría en “la prostituta” de occidente y veía con mejores ojos la propuesta rusa que mejoraba la situación actual china en el conflicto y les permitía con seguridad mantenerse fuera del conflicto, pero fue el sector “reformista” el que finalmente prevaleció, y al finalizar la reunión, la decisión estaba tomada, aceptarían la propuesta americana que prometía mayores ventajas a costa de mayores riesgos.

Cuando los dirigentes soviéticos recibieron la respuesta de Pekín, quedaron un tanto sorprendidos al principio, pero rápidamente dedujeron que aquel mensaje era un no rotundo a su propuesta de calmar la situación con el gigante asiático. El comunicado transmitido a Moscú especificaba una serie de puntos de difícil o imposible cumplimiento para los rusos, que de ese modo se verían obligados a mantener la tensa situación en la frontera con China con el riesgo de que finalmente degenerara en un conflicto que ahora no interesaba en absoluto a Moscú.
Entre las condiciones establecidas por Pekín, estaba la exigencia de que el mando ruso notificara la posición exacta de sus submarinos, buques de superficie y aviones en todo el pacífico suroccidental, así como la cesión de forma inmediata de las islas y territorios en disputa en la frontera entre los dos países, para de esta forma, rebajar la tensión en la frontera y evitar los ataques contra el tráfico naval chino en el Pacífico.

Cuando los políticos y militares soviéticos estaban en plena discusión sobre el curso de acción a seguir llegó una inesperada noticia. Los americanos acababan de hacer una oferta, en la que se comprometían a finalizar sus ataques contra los SSBN rusos si estos a cambio se comprometían a no volver a utilizar armas químicas, e impedir que sus aliados lo hicieran. Además incluía una propuesta para entablar conversaciones con Suecia y la India como mediadores para verificar el estado de los prisioneros de guerra, así como el de los civiles que habían quedado tras las líneas enemigas.
Aquella propuesta había sido introducida poco antes de enviar el comunicado al gobierno de Moscú, y si bien reflejaba la preocupación, principalmente de los alemanes al respecto del trato a los civiles en las zonas de su país conquistadas por los rusos, básicamente era un brindis al sol, pero que se introdujo con la intención de sondear la predisposición de los soviéticos de mantener negociaciones, y si aquellas negociaciones podrían servir para algo más.
Varios miembros del sector “duro” que habían propiciado el golpe de estado contra Gorbachov y que eran los principales promotores de la guerra, consideraron el comunicado americano como un signo inequívoco de debilidad, y de que la guerra terminaría pronto con la URSS como vencedora absoluta.
Pero los ardores guerreros de muchos de los políticos y militares allí presente se habían ido apagando en el transcurso de los días, primero al comenzar a conocer el gasto económico y político que estaba teniendo para su país aquella guerra de agresión contra occidente, y luego por las enormes perdidas de vidas en su ejército y en menor medida en el de sus aliados. Pero el motivo principal, era que muchos de los allí presentes conocían, pese a los intentos del sector “duro” por ocultarlo, que las cosas comenzaban a torcerse para sus ejércitos y el riesgo de escalada a armas de destrucción masiva que hacía unas horas había aumentado exponencialmente a causa del uso de armas químicas en Corea.
La batalla en el Atlántico había virado de forma casi definitiva a favor de la OTAN, y lo mismo podía decirse del Pacífico. La campaña en Europa central consumía soldados y material a un ritmo increíble y su ofensiva por las llanuras alemanas llevaba ya unos días estancada, con apenas leves avances locales, quedando lejos de haber alcanzado los objetivos establecidos para aquellas fechas. Pero lo que más impactó a los dirigentes rusos fue conocer los resultados de la campaña anti-SSBN de la OTAN y que estaba consiguiendo mandar al fondo del mar a una gran parte de sus misiles nucleares basados en submarinos, con la consiguiente merma de poder estratégico y de contragolpe ante un posible ataque nuclear americano. Pero tampoco se quedaba atrás los cada vez más frecuentes y osados ataques aéreos contra el territorio de la URSS y que estaba comenzando a inquietar no solo a los dirigentes, si no también a la población civil que comenzaba a cuestionarse el motivo de la guerra y el sentido que tenía continuarla.
Las acciones de las fuerzas armadas soviéticas tendentes a recuperar el equilibrio estratégico y a retomar la iniciativa, si bien habían parecido exitosas en un primer momento, a la vista de los últimos acontecimientos quedaba claro que no habían surtido el efecto deseado.
Al final de una larga y tensísima reunión, los dirigentes de la Unión Soviética decidieron, con gran sorpresa y enfado del secretario general del Politburó y sus acólitos, aceptar la oferta norteamericana y comenzar negociaciones directas con los EEUU en Suecia mediante los diplomáticos de ambas potencias allí basados. Pero no solo eso, si no que se autorizó sondear a los americanos en esa reunión para intentar encontrar una solución para terminar la guerra lo antes posible, y para reforzar esta nueva postura, se comunicó a los norteamericanos y a la OTAN que al mediodía del día 1 de noviembre, el Pacto de Varsovia declararía un alto el fuego temporal y humanitario, si sus adversarios se comprometían a hacer lo mismo. Se había tomado esa decisión por diferentes motivos, tanto de carácter interno como externos, pero principalmente por que existía la sensación, basada en los datos disponibles, que la situación todavía era favorable a sus intereses y que una finalización negociada de la guerra podría tener ventajas para su país, pero que si se seguía insistiendo en continuar con las hostilidades, dentro de no mucho, las cosas podrían variar y no precisamente para mejor, a pesar de la insistencia del ministro de defensa en que en unas semanas habrían ganado la guerra.
El secretario general y el ministro de defensa nada más salir de la reunión comenzaron a conspirar para dar otro golpe de timón y reconducir la situación, pero esta vez, otras facciones de poder que antes les habían apoyado, como algunos miembros del ejército y del KGB, estaban esta vez en su contra, y por tanto el secretario general y los suyos, fueron “marcados” de cerca para que no pudieran interferir en los incipientes esfuerzos por conseguir una salida ventajosa del conflicto.

[flanker33]

Patrullera soviética lanzando misiles cerca de Shikotan:



Columnas de humo se elevan sobre Tokio:



Uno de los puentes sobre el rio Tumen tras el ataque de los F-117:

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El Final

El 1 de noviembre, el día de los difuntos, resulto ser el día en que muchos soldados, tanto de la OTAN como del Pacto de Varsovia, salvaron la vida gracias al alto el fuego temporal que ambos contendientes acordaron unas horas antes y que entró en vigor desde el medio día. Precisamente a las 12:00, los diplomáticos norteamericanos y soviéticos tuvieron la primera de las tres reuniones que quedarían en la historia como las negociaciones de Estocolmo, y que se extendieron durante los días 1, 2 y 3 del mismo mes. Fueron negociaciones duras, tensas, desconfiadas, exhaustivas, pero finalmente provechosas. El día 1 fue la toma de contacto entre las partes y tras una negociación inicial sobre los prisioneros de guerra y los civiles, los dos grupos de diplomáticos expusieron sus diferentes demandas para un fin negociado del conflicto. El día 2, y ya con instrucciones más precisas de sus respectivos gobiernos, tuvo lugar una maratoniana sesión de negociaciones que concluyó a altas horas de la noche, sin acuerdo pero con acercamientos importantes. Fue la reunión del día 3, no menos larga que la del día anterior, la que finalmente condujo al cese de las hostilidades, y aunque semanas más adelante se produjo la firma formal de los acuerdos, fue ese día cuando se produjo el alto el fuego definitivo que estaba esperando el mundo entero.

Entre los principales acuerdos adoptados en las negociaciones de Estocolmo, se encontraban los siguientes:

-Noruega no podría estacionar tropas por encima del paralelo 68, y la URSS reduciría a un tercio sus tropas por encima de ese paralelo en la península de Kola.
-Dinamarca saldría de la OTAN y sus fuerzas armadas quedarían reducidas a unos 5.000 efectivos en total, y además la isla danesa de Bornholm en medio del Báltico, sería alquilada durante 50 años a la URSS por el precio de 10 rublos al año.
-En Alemania, que fue donde las conversaciones encontraron más escollos, las fuerzas de ambos pactos militares volvieron a sus posiciones de pre-guerra, y se estableció una zona desmilitarizada de 80 km en Alemania Occidental y de 50 en la RDA y Checoslovaquia, mientras que las fuerzas extranjeras permitidas en las dos Alemanias para ambos contendientes se estableció en 30.000 soldados como techo máximo. Así mismo se acordó que en el plazo de tres meses se establecerían negociaciones para fijar una reducción de efectivos y armamento en toda Europa.
Las negociaciones sobre pagos por los destrozos causados en Alemania y otros países no llegaron a buen puerto, y se pactó que quedarían aparcadas hasta dentro de un año, sin que ninguna de las partes reconociera que debía pagarlas (*)

En el Pacífico estos fueron los acuerdos más importantes:

-Los soviéticos devolverían con carácter inmediato la isla de Shemya a los EEUU, mientras estos se comprometían a no estacionar tropas ni instalaciones militares en dicha isla por el plazo de diez años.
-En Corea las tropas volverían a sus posiciones anteriores al conflicto, abandonando las tropas soviéticas Corea del Norte, al igual que las tropas extranjeras en Corea del Sur con excepción de las norteamericanas que quedarían reducidas a 15.000 efectivos y disminuirían su número de tanques y aviones de combate. La Zona Desmilitarizada fue ampliada a 35 km a cada lado de la frontera y se fijaron techos de efectivos y armamento para los ejércitos de las dos coreas, especialmente en armamento ofensivo como tanques, bombarderos o submarinos.
Los EEUU y Corea del Sur presionaron para que les fuera entregado el culpable del ataque químico sobre Seúl, pero se les informó que había sido fusilado y enterrado.
-En una de las decisiones más controvertidas, Japón tuvo que devolver a la URSS las islas de Habomai y Shikotan en las Kuriles, que habían conquistado tan solo unos días atrás, lo que provocó un gran resentimiento en la población y el gobierno japonés contra los EEUU tras la guerra.
-En el Mar de la China Meridional se decidió que las bases soviéticas en Vietnam y las norteamericanas en Filipinas fueran desmanteladas y las tropas repatriadas.

(*) Uno de los pactos secretos de estas negociaciones establecía que la URSS recibiría una importante cantidad de dinero que sería recibido en los meses siguientes a través de compras ficticias de material y productos agrícolas de los países afines a la URSS como la India, Argelia o Mongolia.

Los acuerdos de Estocolmo fueron tachados de imperfectos y demasiado blandos por ambos bandos, lo que si bien hizo que tuvieran una fiera resistencia al principio, tanto en Washington como en Moscú, finalmente todos supieron ver que aquellos pactos no solo pusieron fin a la guerra, si no que establecieron las bases para una paz duradera.

Los miembros del politburó soviético que promovieron el conflicto fueron apartados de sus cargos unos meses después por motivos de salud, y se perdieron en el oscurantismo del sistema soviético, un sistema que no mucho después se vería comprometido por las incipientes revueltas que habían dado lugar al golpe de estado en la URSS…pero esa ya es otra historia.
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[flanker33]

Bueno, se acabo. Han sido muchos meses, demasiados quizás, pero finalmente la 2ª Batalla del Pacífico ha terminado, al menos en lo que a los relatos se refiere.
Comencé el tema para debatir desde un punto de vista histórico y teórico sobre ese periodo y ese Teatro de Operaciones, pero inspirado en el magnifico relato sobre la 3ª Batalla del Atlántico, al final me animé a escribir algún relato, y poco a poco me lié más y más.

Por supuesto no quiero dejar de recordar al compañero sergiopl, que si bien ha decidido no seguir interviniendo en el foro, su colaboración, información y opiniones han sido una ayuda inestimable para este hilo y para mis relatos. Mis más sinceros agradecimientos para él, así como para todos los que habéis intervenido de una forma u otra y también para los que habéis tenido a bien leerlo.

Solo me queda comentaros, que ya que estoy en ello, próximamente pondré algunos relatos más en un hilo que abrí hace años llamado Operación Impensable en el subforo de la Segunda Guerra Mundial.

Saludos.

[ferreret]

Mis felicitaciones al escritor, porque sí te puedes considerar escritor.